scars; 8

10.2K 495 9
                                    

                          8

—¿Alex?—vi a Dan mirándome de la misma forma que cuando me hizo cosquillas, pero está cambió un poco cuando encontró a Ryan junto a mi—. ¿Qué mierda estás haciendo aquí?—se acerca de manera protectora.

—Esto no es asunto tuyo, Bennet. Esto es Alexa y yo—se cruzó de brazos frente a mi. Dan me abraza lentamente por la cintura mientras apoyaba su cabeza sobre la mía, él siempre hacia eso, encaja perfectamente conmigo.

—No hay nada que tenga que hablar contigo, Ryan—lo miro fijo a los ojos y pude ver que algo dentro de él se encendía.

—Así que ahora estás con esté imbécil—dice en tono burlón mientras se acercaba más y más a mi. Dan me aprieta más fuerte contra él—, ¿Bennet te hace feliz?—sonríe irónico, ya sé a dónde se dirije con todo esto—¿sabe que no puedes amarte a ti misma?—susurra demasiado cerca, puedo sentir su respiración chocando contra mi mejilla, las lágrimas pican en mis ojos junto a un dolor de cabeza horrible.

—Ya es suficiente, Brooks, vete de aquí—Dan se aparta de mi y empuja a Ryan lejos de mi.

—Si no puedes amarte a ti misma, no puedes amar a otros, ¿no entiendes, bebé?—susurra nuevamente contra mi oído. La primera lágrima cayó—. Dan, me preguntaba si Alex te ha enseñado sus brazos—sonríe burlón, Dan hace puños en sus manos.

—Alejate de ella, ahora—escupe Dan, dando un paso al frente. 

Ryan tomó mi brazo izquierdo y subió lentamente mi manga. Muchas veces antes lo hizo, era como nuestro ritual de cada semana, cada día, con la diferencia que antes lo hacia con amor y preocupación, ahora se siente como un maldito castigo, una retorcida forma de vengarse de mi. Las lágrimas corren más fuerte, acompañados de sollozos incontrolables. Mis cicatrices más recientes seguían abiertas y rojas, las antiguas se veían horribles. La sonrisa en el rostro de Ryan desapareció y paso sus dedos sobre una de las que aún no cerraban, lloré más fuerte. Dan tomó a Ryan por los hombros y lo empujó contra una pared.

—¡DAN!—chillé al ver que la cara de Ryan estaba siendo golpeada fuertemente por él. Me colgué de la espalda de Dan—...detente, porfavor, detente...—supliqué en su oído, sus manos se congelarón y dejo caer a Ryan. Su cara estaba rota e hinchada, sangrando.

Cierro los ojos y dejo a Dan junto al cuerpo inconciente de Ryan, me siento sobre el sofá y sostengo mi cabeza entre mis manos.

¿Qué había pasado?

Bajo la manga que Ryan subió para su asqueroso castigo.

Oí la puerta cerrarse.

Dan y el cuerpo de Ryan ya no estaban, corrí hacia la ventana y vi que lo cargaba a su camioneta.

De seguro ahora Dan me odia y tiene asco de acercarse a mi, y lo entiendo, tampoco me esforzaría en alguien como yo. Ryan tenía razón, mientras no pueda amarme a mi misma no podré amar a nadie más.

Soy un asco.

ScarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora