Kina seguía con la mirada a Jeff, quien no había dejado de dar vueltas errantes por la habitación desde que hubo cruzado la puerta. Sin permiso, como siempre, lo cual agravaba el enojo que ella ya sentía; Jeff la había dejado plantada en medio de su presentación en la clase de biología. Todo por un crimen que, sí, era muy grave, pero para eso existían oficiales y científicos cualificados encargados de atrapar criminales. Jeff era un estudiante, no un cazador de asesinos. Pero hacérselo entender era tan inútil como enseñarle francés a una foca.
—¡Era un terrestre, estoy seguro! —exclamó Jeff—. ¡Lo juro por la tumba de mi abuelo Jerry...!
—¡Tu abuelo está vivo, Jeff!
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Sangbìbiers
ParanormalSe conocieron en una autopsia: ella burló la seguridad, él contrató un forense falso. Nínive posee un solo objetivo: avanzar en la investigación de la cual depende su vida. ¿El inconveniente? Devon, el príncipe de un oscuro reino que pone la corte p...