Se busca novia © (Disponible en Amazon 🌸Digital, Papel y Kindle Ilimitado🌸)

Capítulo 71

Luna

De pronto veo toda mi vida volverse un caos.

A medida que avanzan las historias publicadas en el perfil de Gabriel, aumenta mi inquietud, mi estado de shock y ni siquiera puedo moverme, no sé qué decir o qué hacer. Soy consciente de cómo la vida tranquila que había logrado construir hasta hoy se fue al carajo. Por más que intento, no puedo procesarlo. Quiero encontrar una explicación, pero no la hay. Eso parece una pesadilla de la que no puedo despertarme. Me devuelvo a la primera historia esperando que solo sea mi imaginación, pero no... ahí está todo, el video, las fotografías, incluso el comisionado junto a mis papás.

—No... —Me repito a mí misma. —No no no...

Una llamada de un número desconocido me interrumpe, cuando descuelgo se presenta como un reportero ¿Cómo carajos un reportero tiene mi número? Cuelgo de inmediato y el perfil de Gabriel vuelve a aparecer ante mis ojos. Intento contactarlo, pero no me es posible. Cuando me voy a sus mensajes me entero que ni siquiera parece que le llega alguno. Me doy cuenta que me tiemblan las manos cuando intento marcar el número de Gabriel una vez más. Sin éxito. Mi pantalla vuelve a quedarse en su perfil y cuando por error presiono el inicio, lo primero que me aparece es una noticia sobre mí, bajando en el feed observo que ya está por todas partes. Revistas amarillistas, perfiles de chismes, ya corrió por todas las redes sociales.

—Luna... —Escucho a Mónica hablarme. Cuando levanto la mirada, veo las caras estupefactas de todos mis compañeros que intentan volver a sus labores cuando mi jefa se los ordena. Además me toma del codo e intenta hacerme caminar del sentido contrario. —Hay fotógrafos afuera, no creo que puedas salir por ahí.

Esto no acaba de pasar entonces. Últimamente es tan normal el número de notificaciones en mi teléfono que no le había puesto mucha atención a ese interés tan repentino. Si me hubiera dado cuenta antes...

—¿Hay fotógrafos? —Lo pregunto en un hilo de voz y me aclaro la garganta. A ver, todavía intento procesarlo. Quiero pensar que esto no es cierto o que en cualquier momento me despertaré y este fue solo un mal sueño. Alcanzo a ver solo un poco hacia el exterior y sí, efectivamente, hay reporteros afuera. —¿A qué hora pasó esto? Digo, lo de las fotos.

—Yo me enteré hace un rato, cuando Brandon, mi asistente, me lo dijo. Él se enteró por redes sociales, así que ya debe tener cierto tiempo. —Continúa su camino hacia la puerta trasera mientras toma su celular y me pregunta si alguien va a venir por mí —¿Tú y Gabriel... —Hace una pausa y el resto lo dice rápido, como si no quisiera mencionarlo: —ya no están juntos?

—Sí, sí lo estamos, por supuesto. —Me aclaro la garganta, otro número desconocido en mi teléfono y ya no sé si debería contestar. —No creo que haya sido Gabriel. —Yo también digo eso rápido. —No, Gabriel no haría algo así...

Mónica no dice nada. Al menos no por un momento.

—Entonces... don Francisco que en realidad no es don Francisco... es...

—Francois. —Termino por ella. Tal vez intenta tomárselo como algo cómico, pero ahorita mi mente está en otra parte y no puedo llevar el hilo de lo que me está diciendo, a mí me sudan las palmas de las manos, el corazón me late a mil y ahora mismo no sé qué voy a hacer o qué es lo que debería hacer. Me detengo antes de alcanzar la puerta trasera, intento una vez más marcar el número de Gabriel, pero no pasa nada. Marco el número de la oficina de mis papás y esa llamada sí se conecta con éxito.

—¿Dónde estás? —Es lo primero que le escucho decir. Es Francois. Le digo que en la radio y él agrega que ya vendrán a recogerme. —Ya sabes qué hacer en estos casos Luna, no salgas por tu cuenta, pueden seguirte y dar con el lugar donde vives, eso es algo muy peligroso. Por favor espera que Emilio llegue por ti.