Why Do You Love Me, Baby? © YoonMin [Omegaverse]

➳ Capítulo 54

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Advertencia  escena para 🔞

— ¡ah!... Dios, Yoon~ eres una animal— se quejó el Omega cuando su alfa se movió con fuerza en él.

Había sido una noche demasiado larga y cansada pero al parecer a pesar de ello Min YoonGi aún tenía mucha energía que explotar con JiMin, iban por la séptima ronda y el alfa no se rendía, y JiMin tampoco quería detenerlo.

JiMin no tenía ni idea de la hora que era, solo que el cielo se empezaba a pintar de celeste con pequeños algodones blancos, eso quería decir que ya había amanecido.

— ahí, maldición, sigue— pidió JiMin.

La cama matrimonial estaba rota, después de tantos golpes contra la pared y unas contra el suelo, las patas de rompieron y ellos seguían encima de ella en su asunto empeorándolo más. Las sábanas estaban hechas trizas, gracias a las garras de JiMin, las plumas estaban por todos lados de la habitación, y la pared término igual de dañado, tenía un pequeño hoyo causa de los golpes de la cabecera.

Una vez más YoonGi terminó con su gran labor de llevar al delirio a su Omega se detuvo esperando que el nudo se deshinchara.

— eres una... bestia...— jadeó JiMin— un animal sin límite.

YoonGi salió por fin de JiMin, este soltó un quejido al sentirse vacío.

— Buenos días, amor— dijo YoonGi con un poco de burla al ver el sol encima del cielo, JiMin estaba por caer dormido pero Min no lo dejo pues tenía otras intenciones.

JiMin aún medio dormido movió sus piernas estropeando el plan del mayor.

— No, es demasiado— JiMin se acomodó en lo que quedaba de la cama.

— una más— puso cara de cachorro y JiMin no sabía si negarse cuando lo vio.

— Min YoonGi tengo un feo dolor en el trasero y tengo sueño, cariño— YoonGi se rindió, el menor tenía razón cuando despertarán seguiría.

Su celo duraba de uno a dos días pero el de JiMin hasta cuatro días, todo iba bien, sus lobos estaban bien no había problema hasta ahora.

...

Eran las cuatro de la tarde cuando JiMin abrió sus ojos, YoonGi lo tenía atrapado entre sus brazos aún dormido, se separó del alfa lentamente hasta que estuvo de pie, al pararse se llevó las manos a la boca al ver el gran desastre de era la habitación.

— ¿Dios mío, todo esto hicimos?— murmuró, levantó el espejo que se había caído seguramente durante todo el movimiento, observó su cuerpo, tenía chupetones por doquier, volteó y vio la marca de una mordida en su nalga derecha, y al recordar, sus ojos buscaron velozmente la marca de unión.

Sonrió como un idiota enamorado.

— Es hermoso— dijo con cariño tocándolo suavemente, aquel roce hizo que YoonGi se levantará de golpe encontrando a JiMin apreciando su marca.

Su lazo estaba tan sensible que aquel toque de JiMin advirtió a YoonGi rápidamente.

— Despertaste— JiMin dejo deber su marca para centrarse en su alfa.

— sí, mi lobo me levanto cuando te sintió alegre.

YoonGi fue levantándose con cuidado y observó toda la destrozada habitación.

— Dios mío— dijo el alfa.

— Si, oh dios mío— habló burlón el Omega.

JiMin le dio un rápido vistazo al cuerpo de su alfa, dejo salir un jadeó, Min YoonGi tenía tremendo cuerpo de Dios que el gozaría por el resto de su vida. El alfa no perdió aquella mirada del menor.