Capítulo 29

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Em

La calle oscura me recibe cuando salgo del edificio donde viven Aiden y Tara. Pasé gran parte de la tarde ayudando a mi mejor amiga con los detalles de la boda ya que mi hermano se encuentra de viaje de negocios.

Tara está perdiendo los nervios, pero en el mejor de los sentidos posibles y no podría estar más feliz de ayudarla en este proceso.

Extrañamente hay muy pocos vehículos circulando por la calle y me cuesta ver entre la densa niebla algún taxi que pueda llevarme a casa. Mi departamento no está lejos, pero ya está haciendo frío para caminar sola hasta allí.

Mi teléfono vibra un par de veces cuando cruzo la primera calle, saco el dichoso aparato y ruedo los ojos al cielo cuando veo el nombre de mi ex novio brillando en la pantalla. Ignoro la llamada con facilidad y lo guardo nuevamente.

Entonces lo siento, un dolor adormece mi cabeza y un grito ahogado se escapa de mis labios antes de ser tapados de forma brusca. Las lágrimas nacen en mis ojos y apenas soy consciente de lo que realmente está pasando hasta que mi cuerpo impacta contra el suelo frío. Intento levantarme pero algo me lo impide o mejor dicho alguien.

—Pero que linda eres. —Un golpe es propinado con fuerza en mi rostro. Mi visión se torna oscura y sé que estoy a punto de perder el conocimiento—. Oh no, no te duermas aún. Me pagaron bastante para que sufras, perra.

Otro golpe más fuerte que el anterior en mi estómago y juro por Dios que sentí algo quebrarse en mi interior. 

—Por favor… —pido sin reconocer mi propia voz—. Te daré todo mi dinero.

Otro golpe más, seguido por un torrente de maldiciones hacía mí. Mi cabello es tomado con brusquedad mientras me arrastra aún más adentro del húmedo callejón.

—¡¿Crees que no recibí mi paga ya?! —brama el monstruo—, aunque podría tomar algo extra.

Una oleada de alivio me recorre cuando pienso que va a tomar mi dinero y dejarme en paz, pero todo se desvanece en el siguiente segundo. ¡No! Mi falda es tirada con una facilidad dolorosa hacia abajo y con una fuerza desconocida comienzo a patalear para sacarlo de encima de mí. Mi desesperación crece cuando no veo ningún resultado de alejarlo de mi cuerpo y lo peor es ver el brillo de lo que saca de su bolsillo trasero. Apenas tengo la capacidad de ver lo que está pasando cuando un dolor agudo me atraviesa. La navaja se retuerce contra la parte baja de mi abdomen y en ese momento siento que voy a morir.

—Eres fuerte perra, pero no lo suficiente…

Mis brazos luchan en vano para defenderme, pero son como gelatina y lo único que logro es sacar su pasamontañas. Su mirada furiosa cae sobre mí y en ese momento me doy cuenta de que firmé mi sentencia de muerte.

—Por favor… —susurro en vano.

—No vivirás para decir algo.
Lo que sucede después es tan rápido  que para mi cerebro lastimado es difícil de procesar. El monstruo se baja los pantalones y dos segundos después mi dignidad se rompe.

—¡No! —Los sollozos sacuden mi cuerpo, pero no le importa.

—Esto se va a repetir… —Sus embestidas aumentaban con cada asquerosa palabra que salía de su boca. Estoy perdiendo y no solo el conocimiento, puedo sentir como la sangre abandona mi cuerpo y se escurre entre sus manos—. Deberías haberlo pensado mejor…

—¡No! —Abro los ojos de golpe y lo que menos espero es estar en una habitación. Mi cuerpo tiembla sin parar y las lágrimas se mezclan con el sudor de mi cuerpo.

FIGHTOVE © 《DISPONIBLE EN AMAZON》Where stories live. Discover now