𝗕𝗟𝗢𝗢𝗗𝗬 𝗗𝗔𝗡𝗚𝗘𝗥 | "El miedo es algo poderoso, pero el amor... no tiene límites de riesgo"
Horror, muerte, esperanza, vida; estos son los pilares que manejan el Nuevo Mundo. De convivir con una familia terrorífica a tener que pasar el resto...
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"Who am I supposed to talk to... if there's no you?"
—¿Qué haces? —preguntó Marion cuando la vio guardarse una tijera quirúrgica.
—Si algo sale mal, quiero estar preparada. —La niña dudó un segundo—. Tú tienes un cuchillo, y yo también necesito algo.
Ante la noticia de que las fueron a rescatar junto a Carol, las niñas estaban ansiosas por volver a ver al grupo luego de tanto tiempo. Aunque no podían confiar del todo en todo lo que la oficial Dawn dijera, por lo que a Marion le pareció entendible la postura de Beth frente a la situación.
—Creo que funcionará —comentó la pequeña sabiamente—. Trata de que no se vea a simple vista —recomendó.
Al ver que ambas estaban de acuerdo en algo, Beth sonrió, preparándose para salir en cuestión de minutos.
Cuando salieron de su habitación, vieron a Carol en silla de ruedas junto al Dr. Edwards. Marion sonrió al verla y la mujer le sonrió de vuelta, acariciando su mejilla y besando suavemente su frente antes de partir para la gran reunión. Mientras Beth empujaba la silla de ruedas, Marion se tomaba del pantalón de ella.
En cuanto las puertas se abrieron, sintió una gran alegría al ver a Jess de nuevo. Tan bonita, alta, ahora con el pelo corto y más segura y alegre que nunca. Había empezado a lagrimear cuando fijó su vista en la pequeña.
La oficial Dawn había preguntado por uno de los suyos y su compañero, que estaba del lado del grupo, le dijo que había sido atacado por errantes. La chica a su lado dijo que ellos estaban dispuestos a traerlo para el intercambio, pero que una manada de ellos los emboscó. Dawn comprendió y aceptó las condiciones.
Primero: Carol por el oficial que Daryl tenía retenido. Espero con ansias ser ella quien llegara a donde Carol estaba ahora mismo. Una vez que vieron que se había efectuado, Beth tomó la mano de la pequeña mientras Dawn las llevaba personalmente hasta donde Rick estaba.
A mitad de camino, Marion se soltó porque le comenzó a sudar la mano. Rick había entregado a la mujer a cambio de Beth y Marion. La última estaba lista para caminar una vez que la compañera de Dawn pasó por su lado, pero la presión en su brazo la detuvo.
Algo andaba mal, Dawn había dejado ir a Beth, pero aún retenía a Marion. En cuanto la niña miró a la mujer, el grupo comenzó a alarmarse.
—El cambio ya está hecho —dijo ella.
—Falta Marion —dijo Jess con voz temblorosa—. El trato eran ellas por uno de los suyos. ¡Entregue a Marion!
—Dos de los suyos por dos de los nuestros; el cambio está hecho. —Jessica no tardó ni dos segundos en desenfundar su arma de nuevo—. Si quieren a la niña, deberán darme a Noah.
