66. Los Ateneo

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"Llegará el día en el que no puedas respirar y todo lo que creías tener desaparecerá"

Esas palabras eran lúgubres, podía estar horas oyéndola y la sesación que tenían era cautivante, tras ser el experimento de la sociedad pude detectar ciertos cambios en mí, a más de la inigualable fuerza y cambios de actitud algo frívolos, seguís siendo yo, creo que solo era la conmoción. Unos fuertes brazos me rodeaban la cintura para pegarme a su cuerpo tibio y adictivo, para mí.

-Noto que no logras dormir, ¿ocurre algo?-Xav estaba al pendiente de mí, sobre todo en las noches. Aún estaban haciendo pruebas conmigo para ver qué más había cambiado y ciertas noches tenía horribles pesadillas que me quitaban las ganas de dormir.

-No, todo esta bien-no tenía ninguna pesadilla, por el momento.

-Te noto un poco pálida, rusa-se burla de mí-. ¿Así te llamaba Rick, no es cierto? Suena gracioso, me agrada.

-Solo a ti te podría llegar a agradar eso.

-Tienes toda la razón, suena muy prometedor. Además, ya tienes la belleza de una de ellas, creo que hasta un poco más. Pero admito que yo tenía en mente que te verías mucho mejor de otra forma.

-Dime.

-Una latina.

-¿Te gustan las latinas?-esa era una buena nueva.

-Me facinan las latinas y estoy atrancado contigo-me toma de las mejillas-. No, mentira, pero me encanta estar contigo, eres perfecta para mí.

-Mi abuela era latina, así que debo tener por lo menos un treinta por ciento de ella. Mi padre es norteamericano por completo.

-Medio latina es mejor que nada latina-de verdad que tenía algo mal en la cabeza, por eso lo adoraba-. Mi padre era latino, creo que mexicano...rayos, se me olvidó. En tanto que mi madre era italiana, he de ahí mis ojos.

-Interesante-le quedo viendo por un buen momento.

-¿Qué?

-Eso lo explica, de cierta forma Sara tiene más de latina que tú, ahora que me percato.

-Que envidia le tengo a esa mocosa-se hecha a reír y me apreta un poco más a él-, es más latina que yo.

-Oye, ¿ya te dije que te ves muy linda con el cabello corto?

-Como un millón de veces-nuestros labios se conectan y puedo sentirme segura, a pesar de todo. Los O'dowell estaban casi acorralados, lo sentía, pero sabía que cuando los tuviera en frente sería el verdadero final. Fue entonces cuando despejé esas ideas corpulentas de mi cabeza, para dejarme guiar por el exquisito beso que estaba recibiendo.

Tomo sus manos y las guio hasta mi cintura para poder enredar las mías en su sedoso cabello que decidía oler a menta los últimos días. El beso se acentua a un nivel casi azorante, puedo decir que Xav gozaba de tenerme cerca como yo lo estaba con él, era perfecto, y así el sencillo beso, pasó a ser algo más fuerte y salvaje con forme pasaban los segundos. Agradecía que tuvieramos un cuarto para los dos solos, por fin me habían dejado estar junto a él, parecía que notaban que era el único que podría controlarme en casos graves. Mi padre atendía a mi madre con afán y mis primos no dejaban de molestar a Evan y Katia, los demás tenían sus propios asuntos, pero aún recordaba las palabras que tuve que decirle a mi tía Vero después de ver a Ximena convertirse en su alter ego.

"Lo lamento, pero ya no puedo hacer nada. Si la veo de nuevo, tendré que acabar con ella"

Cierto, la verdad dolía.

Ahora estábamos en casa de Helga, como sus preciados invitados. Nos comentó un poco de aquel grupo de "Los Ateneo", al parecer siempre hubo un grupo que se concentraba en la sociedad y eran ellos. Ya me decía yo porque ciertas misiones fallaban, aún con gente bastante hábil. Eran parecidos a la sociedad, pero ellos hacían todo lo contrario. Reclutaban gente que decidía hacer el bien y ayudar  a los demás. Abnegados, más que todo.

The Drama of Problem [MAMP#4] #YoSoyAnarky2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora