THE RISE OF THE KINGDOM OF THE SUN

CAPÍTULO 37.- primer fragmento

—¿Estás segura de que es por aquí? —pregunto Aiko cargando la pesada ballesta—, porque ya anocheció y juraría que el palacio estaba más al norte.

—No estamos yendo al palacio —Taylor cargaba las katanas de Aiko—, vamos a una cabaña donde están todos los alfas para celebrar el cumpleaños de Liana, algunos de sus amigos de ella también están ahí.

—¿Vamos a ir así? —Aiko se miró a sí misma con su uniforme de cazadora sucia—, Vi a Natsuki muy elegante, al igual que su amigo Bastian y su esposo. Nosotras parecemos salidas de la guerra.

—Deje unas mochilas con ropa cerca la cabaña —Taylor agito la mano quitándole importancia—, algunas cosas cómodas, a ellos no les importa de igual manera. Seguramente ya están ebrios, esos alfas son buenos para la parranda.

Aiko asintió.

—Ahora que lo pienso —Aiko se quedó reflexiva—, no he visto a Natsuki de fiesta desde que vivo en la misma residencia con él.

Taylor boto un bufido.

—El y Bastian solían salir todos los fines de semana cuando estaban en la universidad —se burló Taylor—, una vez tuve que ayudar a Kerim a buscarlos, iban varias horas desaparecidos, estábamos asustados que hasta los semidemonios también empezaron a buscarlos. No podían encontrarlos por el olor y eso era muy raro, hasta que Theo los encontró totalmente noqueados detrás de un basural. Al parecer tomaron algunos tragos contaminados y sabe dios cómo llegaron ahí.

—¿Enserio? —Aiko le costaba formar una imagen de Natsuki fiestero—, parece alguien serio.

—Lo es con cosas formales supongo —Taylor chasqueó con la boca—, lo era en las clases y con sus notas. Debe ser un alfa muy estricto.

—Si —Aiko sonrió un poco—, se preocupa mucho por su gente.

Taylor la miró de reojo, formando una sonrisa burlona.

—¿Y cómo van?

Aiko alzó una ceja.

—¿Cómo va qué?

—¿Ustedes? —Taylor empujo levemente a Aiko—, ¿Qué tal va su relación?¿Ya se besaron?

—¡Nosotros no tenemos una relación! —exclamó Aiko—, ¡Solo somos amigos!

—Oye, a mí no me quieras ver la cara —Taylor negó con la cabeza—, podrás decirte y engañarte todo lo que quieras, pero tu cara cada vez que Natsuki está en la habitación dice amor, tus ojos disparan corazones cuando él sonríe.

—Estás mal de los ojos.

—Vamos Aiko ¿No somos amigas? —pregunto Taylor—, no tienes que ocultarte de mí, soy la persona que más te entiende. Se lo que es negar los sentimientos hacia un hombre lobo, luchar con la incertidumbre de si eres capaz de afrontar una relación difícil con una persona que dice ser tu alma gemela y que quiere una relación para toda la vida. Eso y sin perderte en el camino.