9. Casi tuya

1.1K 111 666
                                    

<< Toda aventura merece un primer paso >>
Alicia en el País de las Maravillas

Pepa y Amelia posaban sonrientes para las cámaras en el orgullo, cariñosamente agarradas y dedicándose sus ya "falsas" y ensayadas miradas de complicidad. Tras las poses Amelia recibió un mensaje de su amiga.

Silvia:  He visto a Luisa agarrar un taxi, la misión va en camino... Ahorita os veo en el carro.

Las chicas aprovecharon que empezaba el concierto de Marta Soto para "escaparse" del orgullo, Amelia se quedó con ganas de verla, esa chica componía realmente bien. Pepa dijo que quería encontrar a su amiga y Amelia asintió, sin decir nada, aunque por dentro era su mayor deseo, encontrar a Luisa, desde que había salido corriendo no podía pensar en otra cosa. La morena de rizos fue a dejar a las chicas en casa y despidiéndose primero de Pepa, bajando del coche algo inquieta, su mente, para no variar, parecía una noria que no dejaba de dar vueltas.

- Gracias por traerme Amelia, y de nuevo, disculpa por haberte confundido con mi actitud poco apropiada... - Intentaba no acercarse a ella, era consciente de la química que tenían y no quería cagarla de nuevo para que su amiga se enfadara aún más.

- Tengo que pedirte un favor Pepa. - Rogaba Amelia y la diva la miró sorprendida.

- Mientras no sea sexual... - "¿Sexual? Pues mal no me vendría tampoco, no... si es que es realmente atractiva, mírala, sus ojos, su sonrisa permanente, su cuerpo se infarto, te está mirando Amelia, te está mirando... Amelia, cuando Pepa te besa no sientes emoción, solo calentura... Céntrate en Gómez, Luisa, la rubia, sus gafas, su voz temblando, la manera en la que tímidamente muerde el boli, su forma de escribir atravesando hasta tu alma..." Pensaba Amelia, que se quedó en silencio.

Pepa se reía a la vez que repasaba aquello que acababa de decir, ella y su manía de hablar sin pensar, no podía evitar mirar a Amelia "Que no diga que si, por favor que no diga que si... Es que mírala, tan madura, qué cara, qué curvas, qué rizos para agarrar mientras te hace rozar el cielo... Luisita, piensa en ella... Luisita... Tienes que hacer de hada madrina, calabazas... Calabazas las que la adornan en el pecho... Pepa no vas bien, no vas bien" pensaba la diva y entonces, Amelia rompió el silencio.

- Quería pedirte que... Esto... - Rascaba su cabeza - Si Luisa está en casa podrías decírmelo, ¿Por favor? - Rogaba Amelia, con tan solo la imagen de la compositora en su mente. Algo en la cabeza de Pepa hizo click y entonces abrió los ojos como platos.

- ¿Te gusta Luisita querida amiga hetero? - Remarcó la última palabra y Silvia, desde el coche, no podía evitar reírse - Es eso... Te gusta... - Se llevaba las manos a la boca, aquello era perfecto, le gustaba Luisita, su plan no podía ir mejor.

- La verdad es que... No lo sé... No puedo dejar de estar pendiente de ella. Me sale solo, ahora mismo me invade la preocupación y me gustaría saber qué le pareció mi canción y... - Hizo una mueca - ¿Ella te ha dicho algo? Es que a ratos parece que hay algo, y otras veces, no sé, creo que no la caigo ni bien... Aunque es diferente de cuando... De como cuando tú... - Por un momento dudó si seguir hablando, pero se estaba sincerando y quería hacerlo por completo, lo necesitaba.

- ¿Cómo? - Pepa la miró con desconcierto.

- Pepa es que... Soy consciente de que me has rechazado, pero yo nunca me había sentido atraída por una mujer como lo hago cuando estoy contigo... Porque te miro y no puedo dejar de pensar en cómo sería tenerte en la cama y... - Bajó la cabeza - Así que si, tal vez no sea tan hetero - Susurró - ¿Vale? Ya está, dicho...

- Bueno... - Por un momento le costó hablar, Amelia Ledesma, su icono sexual, le estaba diciendo que se sentía atraída por ella "Luisita, piensa en Luisita, por favor Pepa, que de esta le arrancas las bragas a la morena" respiró profundo.

Escríbeme una canciónWhere stories live. Discover now