2. Impacto

293 15 6
                                    


Cuando colgué la llamada mis manos estaban temblando. Sentía un vacío en el estomago que se extendía por mi cuerpo hasta atorarse en mi pecho. Mis ojos no parpadeaban y tuve muchas ganas de vomitar.

Seguramente mi rostro estaba muy pálido porque Emma corrió de inmediato a donde me encontraba de pie completamente desorientado. El mundo de repente había dejado de ser seguro y ningún lugar parecía sentirse bien.

—¿Noah estás bien? —quiso saber Emma con sus ojos clavados en mi rostro, pero yo no la sentía. Estaba tan asustado. Tan ausente—. ¿Noah que pasa? Respóndeme.

Las lágrimas se desbordaron de mis ojos sin parpadear. Tenía la boca seca y sentía el cuerpo completamente rígido. Pero el calor del cuerpo desnudo de Emma me reconfortó. Ella simplemente, había decidido sólo abrazarme.

Así permanecimos por unos minutos sin decir nada, mientras yo sollozaba. 

—¿Noah quién era? —insistió preocupada sin dejar de abrazarme.

Mis manos se extendieron por su espalda y la abracé mientras lloraba.

—Mis papás sufrieron un accidente. Debo volver a casa.

—Seguro estarán bien —quiso apoyarme.

—No lo sé, he tenido una sensación de vacío todo el día Emma —en ese momento no me había dado cuenta de que esa era la razón por la que todo se sentía vacío y sin vida. Era un presentimiento. El universo estaba tratando de decirme que mis padres... mis padres... habían... 

—Aún no sabes la gravedad del asunto —su voz me interrumpió como un milagro y desarticuló rápidamente ese pensamiento que no me atrevía a confrontar—, no seas negativo —y me abrazó con más fuerza—. Si hace falta puedo viajar contigo.

Y entonces, conocí a la Emma que nunca había percibido antes.

Esa que era completamente humana.

—Gracias —dije aún con lágrimas en los ojos.  

La Insoportable Existencial del Amor (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora