Libertad- OGL 👑🐭

Perte 65

Mis padres, mi hermano y Lolita habían llegado por la tarde, la mañana siguiente se llevaría acabo el desayuno en el cuál anunciariamos nuestro compromiso.

Mi madre necesitaba salir por un par de zapatos que fueran los adecuados para su vestido, salimos con dirección al centro comercial.

-¿Viste lo tranquila que es la vida lejos de cosas ilegales?.- rodé los ojos.- sabes que es verdad.

- Si mamá, es verdad.

Claro es Tranquila, pero nada en absoluto nada feliz, pensé en mis adentros.

- Mañana es el inicio de una nueva vida Fátima y no lo puedes echar a perder por favor, valorala oportunidad que te está dando Enrique.

- Ok.- dije a secas.- bajemos por tus zapatos.- descendi.

Comencé a caminar a la entrada de la plaza, tomando distancia de mi madre para no tener que escucharla.

Estaba cansada mentalmente, no sólo por ella, sino también por pasar noches esperanzada en qué el celular que me dio Ovidio sonara, por la distancia que mi amigo Mickey sin querer había puesto entre los dos, si ya no éramos tan unidos, mordi mi labio al recordar el día que se enteró de mi compromiso con Enrique.

-¿Qué tal tu fin de semana? ¿Cómo están tus papás?.- cuestionó mientras desayunamos en la oficina.

-Bien, mi papá mucho más animado y mi mamá está muy feliz.

- Me alegró, a ti te hacía falta estar junto a ellos, te he visto mejor estos días, lastima que durara muy poco.

-¿Por qué lo dices?.- cuestioné.

-No te confíes tanto, Enrique está muy tranquilo pero no creó que esa paz dure, terminara sacando su verdadero yo.- suspiré profundo.- sabes que es verdad.

- Probablemente, pero tendrás que hacerte a la idea, él formará parte de mi vida y a los dos los quiero, haz un intento por convivir con él.

-No, podrá ser tu novio pero no quiere decir que yo tenga que comprartir con él, no lo tolero y no puedes obligarme.

- Nunca pasaría por mi mente hacerlo, pero quiero que estés a mi lado el día de mi boda.- él se ahogo con su bebida.

-¿Qué boda?.- cuestionó con desagrado.

En un movimiento alce mi mano y la sostuve frente a él mostrándole el anillo de compromiso que llevaba en mi dedo anular.

-Lo que me faltaba.- dijo molesto.- es un error y no es posible que.- se quedó en silencio y mordió su labio.- mira Fátima, se que lo que viviste fue muy duro y no es fácil de sobrellevar, que te hace falta sentirte amada, pero no creó que Enrique sea la mejor opción, mejor vamos a terapia yo te acompaño y ayudo en todo lo que se necesita.

- Lo siento, agradezco tu preocupación pero ya lo decidí, en dos semanas es mi fiesta de compromiso y espero que me acompañes.

- No sé si pueda.

Sin decir más, se puso de pie y salió de la habitación dejandome sola. Dejamos las salidas por las tardes, sólo hablábamos en horario laboral, pero si me escuchaba hablando por teléfono con Enrique o la organizadora de eventos prefería marcharse.

Sacudí levemente mi cabeza para sacar ese recuerdo de mis pensamientos, o posiblemente me sentía así por los efectos secundarios del Valium que había consumido en estos días para poder dormir y estar tranquila, no sabía lo que era pero tenía la certeza de que  estaba cansada de la vida.

Me aleje de ella, fingiendo mirar ropa pero en realidad no ponía atención en nada, mi mente perdída y confundida no podía aceptar que él me había olvidado, pero la vida era buena conmigo me quitaba a Ovidio y me daba a Enrique, más vale viejo conocido que malo por conocer.