Parte 36

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Después de estar cuatro días con Ovidio el remordimiento comenzó a hacerse presente, claro yo estaba quitada de la pena disfrutando mientras mi amigo me esperaba para echar a andar el plan.

- ¿No le gustó?.- preguntó Ovidio cuándo me vio revoloteando el desayuno.

- Cómo siempre todo está muy rico.

- ¿Entonces por qué no come?

- Es que, estoy pensando en que ya es momento de que regresé a Puebla.

- ¿Pero pa' que?, ya no tiene el compromiso del trabajo, ya se puede quedar más tiempo aquí conmigo.

-No te comenté que Mickey también renunció, los dos junto con Miriam su novia pensamos poner un spa y es muy desconsiderado de mí parte que no esté ayudando.

- Tiene razón ps' si se tiene que ir por trabajo lo entiendo, ¿En qué le puedo ayudar para que lo hagan? ¿Cuánto dinero ocupa?.

- ¿Me quieres ayudar?.- él asintió.- cuidate mucho, eso es lo único que necesito, que estés bien y que pueda verte de nuevo.

- Mi reina, ya sabe que si usted me lo pide lo haré y con el favor de Dios nada malo pasará, pero dígame ¿Cuánto dinero necesita?.

- Es que no lo necesito, ya lo tengo, lo que ahora nos falta hacer es buscar un local y comprar todo lo necesario.

- ¿Está segura?.

- Segura.

- Entonces ¿cuándo se quiere ir?

- Buscaré un vuelo para esta noche.

- Ya déjese de cosas, échele cabeza mi reina, esas horas que pierde en el aeropuerto las podemos pasar juntos, ¿A poco no está mejor?.

Claro, tenía razón, era un mejor plan pasar esas horas con él y no aburrida esperando un avión.

- ¿Cuándo me podria ir? ¿En dónde me bajaria?.- cuestioné.

- Seria en la noche, yo mismo la acompaño a la pista, le doi su beso de despedida, se va en el aparato junto con Tello y en dos horas ya está en su casa, sana y salva.

- Bueno, lo pensaré, un beso no es suficiente para animarme.

Los dos reimos, no volvimos a tocar el tema y terminamos de desayunar. Él salió a ver asuntos de su trabajo, mientras yo me quedé en casa.

Estuve un rato en la recámara, hacía maletas mientras meditaba si era buena opción tomar la propuesta de Ovidio. Terminé mi maleta y decidí bajar a platicar con la señora Lupita para poder distraerme.

- Buenas tardes Lupita.- dije al entrar a la cocina.

- Hola señorita, ¿Qué se le ofrece?.

- Gracias, sólo quiero compañía, estar allá arriba no es muy divertido.- ella rió.- ¿Qué hace de comer? Huele muy rico.

- Caldo de papas y tortillas de harina, al patrón le gustan mucho.

Con curiosidad me acerqué a la estufa, olía aún más rico.

- Me tendrá que enseñar a prepararlo para poder hacérselo un día.

- Si señorita, miré es bien fácil.- sonrió.- pero primero póngase un mandil no se vaya a manchar.

De uno de los cajones saco un delantal de color negro, me ayudo a atar las cintas sobre mi cuello y comenzamos a preparar la comida, yo le ayudaba a picar mientras ella me explicaba cuidadosamente cada paso.

- Buenas tardes, dijo una voz femenina detrás de nosotras.

- Buenas tardes Señora Griselda ¿Quiere un vaso de agua?.- dijo Lupita.

Libertad- OGL 👑🐭Where stories live. Discover now