Parte 54

807 81 6
                                    

Al abrir los ojos me percate de que el peor de mis miedos era una realidad, mi hija acababa de nacer, pequeña e indefensa, al parecer la cirugía no habías alido bien, todo se sentía extraño.

- ¿Mi hija? ¿Cómo está? Quiero verla .

- Tranquila.- me dijo una de las enfermeras.- por el momento no puede verla, está en la incubadora, en un momento llamo a su familiar para que pase.

No respondí nada, simplemente asentí con la cabeza y trate de tranquilizarme, sabía que me encontraba en el área de cuidados intensivos, hecho que me hizo preocupar más.

No solo estaba preocupada por mi hija, ahora también lo hacia por mi salud, no quería hacerle falta a mi niña, respiré profundo, cerré los ojos y esperé a que Tello entrara.

- Mi reina.

Al escuchar su voz una inmensa tristeza se apodero de mi, abrí los ojos y lo observé parado a mi lado con la mirada llorosa, se inclinó y beso mis labios, provocando que mis lágrimas comenzaran a brotar.

- Mi amor ¿Cómo se siente?.- me miró fijamente.- no me lloré que se va a poner mal.

- Llegaste muy rápido.

- No la iba a dejar sola, me vine en chinga.- beso mi mano.

- Gracias.

Me limite de decir a agradecer para poder volver a llorar y es que, aún tenía miedo de lo que pudiera pasar.

- Mi reina, no me lloré que todo va a estar bien.

- ¿Pudiste verla?.- Cuestioné temerosa.

- De lejos, pero se ve que esta bien chula.- mencionó mientras acariciaba mi rostro.

- No quiero que nada malo le pase.- supliqué sollozando.

- Ay mi amor.- él suspiró, acariciando mi cabellera.- sólo pasará lo que Dios quiera que pase, la lucha se le está haciendo, pero no le puedo prometer algo que no está en mis manos, nomás' le puedo asegurar que pase lo que pase voy a estar a su lado.

No dijimos nada más, simplemente me abrazó mientras yo permanecía con los ojos cerrados para contener el llanto y orando en mi mente, sentí humedad en mi brazo.

Abri lo ojos para darme cuenta de que Ovidio estaba llorando.

- Tranquilo amor, todo estará bien.- dije consolandolo.

- Es que, esta muy chiquita y mire usted también esta delicada.- me miro temeroso.- no quiero que nada les pase, es la primera vez que estaba siendo feliz, las amo un chingo.

- No pienses eso, vamos a estar bien.- respiré profundo.- el camino será largo, pero estaremos juntos y se sentira más liviano, antes de lo que nos imaginamos estaremos en casa con María.

Él sólo asintió, nuevamente se quedó todo en silencio, sólo dejaba pequeñas caricias sobre mi mano.

- Señora Kuri.- llamó el médico al entrar.- su presión cardíaca está mejorando lentamente, a pesar de que la cirugía fue de emergencia no tuvo complicaciones.

- Muchas gracias.

- Señor.- giró su mirada a Ovidio.- es necesario que se dirige a la sala de espera, el neonatólogo lo buscara en un momento para darle informes sobre la salud de su hija.

- Gracias Doctor.- mencionó Ovidio cabizbajo.

- Nada que agradecer, nos vemos más tarde.

El ginecólogo salio de la habitación, escuche a Ovidio respirar profundamente.

- Ya escuchó chula, voy a ver a cómo me está la ratoncita y me regreso pa' acá.

Beso mis labios, yo tomé su mano para poder detenerlo.

- Ovidio.- él me miró fijamente.- prométeme que pase lo que pase me dirás la verdad, no me mientas por favor.

- Sabe que no mi reina, yo nunca le haría eso.

Salió de la habitación, los minutos que se marchó me pesaban como si de horas se tratara, decidí enfocar mis pensamientos en algo más y comencé a orar para que el tiempo se pasara rápido.

Después de un rato vi nuevamente a Ovidio entrando al área dónde yo me encontraba.

- ¿La viste?.- pregunté inquieta, él asintió.

- Que le dije, está igual de chula que usted, tiene su boquita y sus ojitos que me traen tan apedejado.- sonrio.

- Dicen que los bebés que se hacen con amor salen muy lindos.

- Ps' con esta plebe nos pasamos.

- Pero ¿Cómo está?.

- Hay la lleva, no le voy a mentir, el doctor dice que ni mejor ni peor, está estable.

- Bueno, al menos no son malas noticias.

- Hágame un huequito que me voy a quedar con usted toda la noche.

- No puedes, es área restringida.- reí.- bueno, a ti nada se te dificulta.

Me arrime un poco para que él pudiera recostarse junto a mí, con cuidado me abrazó tratando de no lastimar mi mano que se encontraba canalizada con el suero.

- Yo bien le dije que una vez que estuviera conmigo ya no se iba a poder librar de mí.

- ¿Qué hiciste para poder quedarte?, mejor no me lo digas, de todas formas no quiero que me dejes sola.

Besé sus labios y me aferré a él, entre medicamentos y angustias la noche se hizo eterna, fue muy poco lo que pudimos descansar.

Besé sus labios y me aferré a él, entre medicamentos y angustias la noche se hizo eterna, fue muy poco lo que pudimos descansar

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Libertad- OGL 👑🐭Where stories live. Discover now