Libertad- OGL 👑🐭

Parte 64

Los días pasaban volando, en un abrir y cerrar de ojos ya había pasado una semana desde que volví con Enrique.

Todo marchaba bien en lo que cabe, a decir verdad no sentia nada por él, pero, mis papás estaban tranquilos y mi mente ocupada, quién no lo había tomado a bien era Mickey.

-¿Puedes sostenerlo por favor?.- preguntó Enrique dando un papel

-Claro.-sonrei.

Entre mis manos sostuve el ticket de la última caseta que pagamos para llegar al puerto, era fin de semana y estábamos de visita en casa de mis papás.

Cuarenta minutos después estábamos en casa, mi mamá esperaba con una rica comida, mi papá tenía un mejor semblante que la vez pasada, mi hermano estaba serio y pensativo, mientras Lolita no podia disimular su descontento.

-Ay mi niña, hay va de nuevo con ese hombre que tanto daño le hace.

-Lolita.- la reprendi.

- Es la verdad, tan feliz que se veía con el joven O....- la interrumpí.

- No te creas Lolita, a su lado no todo era color de rosa como lo piensas.- tomé el plato y salí con dirección al comedor.

-¿Qué planean hacer está noche?.

- Nosotros ver una película juntos.- miró a mi madre, quién sonrió.- Marco seguramente tiene planes con sus amigos.

- Quiero invitarlos a cenar, escuché de un nuevo restaurante en la orilla de la playa y la comida párese ser muy buena.

-Claro, me parece que se llama Vacanora, también he escuchado comentarios sobre lo rica que es la comida.

-Entonces ¿Qué dicen, vamos?.- cuestionó Enrique.

- No queremos ser entrometidos, ustedes tienen que salir sólos como una pareja y podemos incomodar.

-No Benjamín, no nos incomodan.- tomó mi mano sobre la mesa.- Fátima pasa muchos días lejos de ustedes y nosotros podemos salir sólos en Puebla ¿Verdad?.- me miró a los ojos.

-Claro, vamos.- los animé.- seguramente la pasaremos muy bien, anímate papi.- sonreí.

- Bueno, vamos ya me hace falta salir y mejor compañía no puedo tener.

Terminamos de comer y salimos al patio para tomar café y jugar domino, Marco había decidído no unirse al plan, por el contrario había subido directamente a su habitación.

El calor era tan sofocante que decidí abandonar la partida para poder ir a la cocina por un vaso de agua fría.

Al entrar Lolita lavaba platos mientras Marcos urgaba en el refrigerador.

-¿Estás seguro, no quieres acompañarnos?.- le cuestione, mientras me servía agua.

-Seguro.- respondió firme.

- Deberías de acompañarnos, dicen que el lugar es muy bueno.- di un trago.

- Sobre el lugar no tengo dudas, lo que me molesta es la compañía.- Lolita río a lo bajo.

-¿Por qué la risa?.- cuestione.

-Ay mi niña.- Lolita dejo lo que hacía y me miró.- Marquitos y yo somos los únicos en esta casa que nos damos cuenta lo mal que le hace ese hombre.

- Así es, y te lo mencionamos por tu bien, no para arruinar tu velada.

-No veo el porque tengan que preocuparse, estoy tranquila y feliz, tenemos años juntos y nos conocemos a la perfección, deberían de alegrarse.