El apartamento

XL - Colegiala

Narrado por Terry

-Duque de Grandchester-

-Hola hijo - me dice con una ¿sonrisa?, creo que la última vez que lo vi sonreír fue cuando era niño, en una tarde de picnic con mi madre.

- Señorita Ardley, es un placer volver a verla - le dice a Candy mientras besa su mano, pero un momento ¿¿Volver a verla?? Abro los ojos como platos muy sorprendido y Candy mira mi aturdimiento, pero no comenta nada.

- ¿De dónde conoce a mi prometida? - le pregunto fríamente, mientras me acerco a ella para protegerla.

- Le debes mucho a esta señorita Terrence, ella me convenció de no mandar a la Guardia Real para que te devolvieran a Londres cuando te fuiste del Colegio ¿o creíste que dejaría que te fueras a América sin retenerte?- estoy áun más confundido, miro a Candy en busca de respuestas

- Terry - ella hace una pausa - yo hablé con tu padre para que no fuera por tí y pudieras cumplir tus sueño de actuar - siento un vacío inmenso en mi estómago.

- Así fue, me dio argumentos tan convincentes que terminé aceptando y sabes que soy un hombre de palabra -

- Perdón por no comentártelo antes - me dice con una sonrisa tímida. La miro a los ojos, tomándole la mano y besando su dorso con adoración.

- Candy, ahora más que nunca sé que te debo toda mi felicidad- mis padres nos miran, pero nosotros ya estamos en nuestra burbuja. Ella se comienza a intimidar por la atención.

- Terry ustedes deben hablar, es mejor que me retire - se acerca a mi oído - Escúchalo y perdónalo - me susurra, mientras me da un dulce beso en la mejilla.

- Yo voy contigo Cariño - le dice Eleonor y ambas salen hacia la casa.

- Terrence, ya eres todo un hombre - hago una mueca de disgusto y me dirigo hacia Theodora para acariciarla, ella me dará la calma que necesito en este momento - Y debo decir que tu prometida es una joven espléndidamente hermosa y decidida, sé que te hará muy feliz - su gentileza me pone alerta, no quiero caer en sus sucios trucos.

- Duque de Grandchester dudo que haya venido hasta aquí para apreciar la belleza y simpatía de mi prometida - le respondo cortante.

- Terrence tienes razón, no vine a eso -

- Aunque ya veo que usted no cambia, me está tratando de sobornar trayéndome a Theodora como ofrenda, típica artimaña suya -

- Hijo por favor, la traje porque sé que la aprecias -

- Ahora sí soy su hijo, pero cuando me mandó a los siete años a ese internado o cuando su despreciable mujer abusaba psicológicamente de mí, ahí dígame ¿Dónde estaba mi padre?- le digo con tono de reproche, aunque al final un pequeño tono de sufrimiento me traiciona.

- He venido a pedirte perdón, sé que no fui un buen padrea y lo lamento mucho - me dice sinceramente, quedo incrédulo, no puedo creer que el gran Duque de Grandchester me haya pedido perdón, nunca lo había escuchado disculparse por absolutamente nada. Me quedo callado tratando de seguir debatiendo sus palabras., pero termino callando, tanta felicidad compartida junto a mi Pecosa parece que me ha ablandado el corazón.

- No hubiera aceptado su disculpa ni creído en su arrepentimiento, pero lo reflexionaré solo porque ella me lo ha pedido, aunque no le prometo nada-

- Es suficiente para mí - me dice, salimos hacia la casa, caminando en silencio - Terrence quiero que sepas que estoy divorciándome de Beatriz, me di cuenta de cosas poco honorables sobre ella, en este momento nuestro matrimonio ya debe de estar disuelto - en realidad me alegro porque al fin la Duquesa Cara de Cerdo se divorcie de mi padre, pero no se lo demostraré - me quedaré un tiempo en América, espero que me des la oportunidad de compartir con ustedes - lo miro inexpresivo.