Capítulo 63: Rescate

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Al enterarse de que la señorita era una conocida del comandante del batallón Yang, el hombre guardó silenciosamente su pistola. Su voz era débil e inaudible cuando habló, "Señorita, ve y díselo al comandante del batallón Yang. Dígale que el objetivo ahora está en alerta."

"Llegaremos al campamento pronto, no hables más. Conserve esa energía para ver al comandante del batallón Yang y luego dígaselo". La expresión de Ye Jian era fría. El peso del soldado que medía casi 180 cm estaba apoyado sobre ella, pero ella mantenía un ritmo constante.

Una vez que el comandante del batallón respondió a la llamada y escuchó la voz, su expresión se volvió inesperadamente imponente, "Ya veo, ¡enviaré a los soldados a buscar! ¡Te reportaré inmediatamente una vez que reciba alguna noticia!"

"El objetivo es un espía número uno de la provincia del sur, ¡ten cuidado!" La voz baja del hombre del teléfono sonaba fría. "¡Llegaré a la ciudad de Fujun diez minutos después!"

Cuando Ye Jian apareció en el puesto de avanzada, el rostro de los dos soldados que estaban de servicio se oscureció instantáneamente.

Uno fue a notificar al comandante del batallón Yang, el otro llevó a los heridos.

En el interior, el comandante del batallón Yang trajo a un médico con él mientras salía corriendo y se reunía con ellos.

"Una herida de bala en el hombro izquierdo. Ha perdido demasiada sangre y ahora está inconsciente. Existe la posibilidad de que haya una infección en su herida y necesite un tratamiento antiinflamatorio inmediato". Al ver al comandante del batallón Yang, Ye Jian le informó rápidamente de los detalles conocidos. "También hay un problema en el Hotel Chunyang. Habían llegado cinco extranjeros. ¡Uno de ellos tenía acento de Hongkou y resultó herido!"

* Hongkou = Shanghái

¡Acento de Hongkou! ¿No es eso... los ojos del comandante del batallón Yang miraron profundamente a Ye Jian y dijo: "Chica, esta noche, es posible que debas agotarte un poco. Vuelve primero a tus aposentos. El médico se ocupará de la herida de este soldado."

Los ojos de Ye Jian se tensaron ligeramente y susurró suavemente: "Tío Yang, ¿hay solo un médico aquí? Me temo que un médico podría no ser suficiente. Tengo un poco de conocimiento sobre cómo tratar heridas de bala. Déjame ayudar."

Cuando la muchacha hablaba, su actitud y su manera de pronunciar sus palabras siempre convencían inexplicablemente a quienes la rodeaban. El comandante del batallón Yang asintió sin pensarlo dos veces: "Bien, entonces ayudarás al médico."

Al estar en una escuela de medicina por más de un año, su conocimiento en la profesión era mucho mejor que los estudiantes allí, entonces, ¿cómo podría ser asignada solo como asistente?

Por supuesto, eso no pudo evitarse, ya que ella tenía solo 14 años y nunca antes había estado en contacto con heridas de bala. El único conocimiento que tenía al respecto eran solo las teorías que se enseñaban en el ejército.

Una vez que se colocó el goteo de antibiótico, se debe limpiar la herida y quitar la bala antes de limpiar la herida nuevamente.... Lo que sea que el médico necesite, podría entregárselo de inmediato. Incluso usaba un algodón esterilizado para limpiar el sudor del médico.

Cuando Xia Jinyuan entró, vio una figura esbelta junto a la mesa de operaciones. Como un guardia, cuando escuchó sus pasos y de espaldas a él, inmediatamente tomó un bisturí y se volvió. Una mirada fría se disparó hacia él.

"Soy yo, Xia Jinyuan". Su voz era baja. Se quitó el casco, dejando al descubierto su hermoso rostro.

Llevaba su uniforme de combate, lo que le hacía carecer de la elegancia que tenía cuando vestía su uniforme militar. Trajo consigo un aura fría a su alrededor cuando entró, lo que llenó toda la enfermería con un sentimiento asesino parecido al acero.

Ye Jian suavemente dejó escapar un suspiro de alivio. Entonces resultó ser él.

El médico estaba a punto de hacer una limpieza a fondo en el área herida en el hombro del soldado. Sin volverse para mirar a Ye Jian, el médico dijo: "Área izquierda, prepare el instrumento de desbridamiento de heridas desechable para su uso."

Después de solo echarle un vistazo, Ye Jian agarró un fórceps con rapidez y precisión y se lo dio al médico mientras preparaba el instrumento de desbridamiento de heridas desechable al mismo tiempo. En el momento en que se retiró la bala, la herida se lavó inmediatamente para prevenir una infección anaeróbica.

La presencia de Xia Jinyuan no afectó a Ye Jian en absoluto.

La Mujer Soldado Militar Con Obstinación Inquebrantable [1]Where stories live. Discover now