La Mujer Soldado Militar Con Obstinación Inquebrantable [1]

Capítulo 165: No Intimides A Los Orgullosos

Esto era lo que Xia Jinyuan quería transmitir. Dado que Ye Jian pudo concluir que no intervendría en los arreglos de la Interpol, naturalmente pudo entender cuál era el otro significado de él.

Un país débil era un tema tan pesado como el peso de una montaña. Del mismo modo, ¡también fue algo que estimuló al país! Afortunadamente, China siempre estaba dando un paso adelante, marchando hacia la meta de ser un país fuerte.

Ye Jian no se dejó engañar por la severidad que mostró a través de su tono porque sabía que en un futuro cercano, el poder militar de China haría que los países que antes eran fuertes se sintieran amenazados.

Ella rió lentamente. "Deberías conocer la fuerza de nuestro país mejor que yo. Dado que alguien como tú no se atreve a interferir tanto, una simple estudiante como yo definitivamente no interferirá en absoluto."

"No, muchachita, interferiremos, pero el momento no es ahora. En cambio...." Xia Jinyuan levantó ligeramente las cejas y su expresión fría parecía segura y tranquila. La nobleza innata escondida bajo su expresión mostró aún más su temperamento frío e impredecible.
Sus labios se curvaron hacia arriba y se detuvo un momento, luego dijo lentamente: "En cambio, los pondremos en una posición en la que tendrán que pedir nuestra ayuda para resolver sus problemas. Solo espera, muchachita. Ya que estamos aquí, ¿cómo vamos a dejar que la gente nos siga menospreciando?"

Los soldados tenían una mentalidad orgullosa y representaban el poderío militar de su país. Si fueran menospreciados, ¡ja, naturalmente tomarían represalias sin piedad!

"¿Qué tengo que hacer? De repente estoy deseando que llegue el día que has mencionado". Las cejas de Ye Jian se curvaron mientras sonreía, y sus ojos claros que brillaban como estrellas miraban al hombre de pie con orgullo en la oscuridad. "Espero que cuando llegue el momento, el Capitán Xia todavía me recuerde y me lleve para presenciarlo".

Sus palabras hicieron que Xia Jinyuan se riera alegremente y se levantó de la tumbona. Su silueta imponente pero esbelta brillaba como la hoja de una espada, y habló con voz indiferente: "Relájate, pequeña muchacha. El crecimiento no ocurre solo con el paso del tiempo; todavía necesitas más entrenamiento."

Él esperaba con ansias su crecimiento, por lo que estaba haciendo todo lo posible para construirle la base más sólida posible mientras aún se estaba desarrollando.

La fiesta de abajo sólo terminó a las diez de la noche. Si no fuera por los recordatorios de los maestros, lo más probable es que hubiera continuado hasta altas horas de la noche.

Ye Jian no volvió a bajar. En cambio, usó la excusa de que estaba haciendo sus exámenes y se quedó sola en su habitación, digiriendo las palabras de Xia Jinyuan. La tolerancia de hoy se pagará otro día. Un hombre de honor sabe que hay cosas que se deben hacer y cosas que no se deben hacer.... Pensando en ello, de repente se sintió muy motivada.

"La gran competencia tiene tres rondas. La primera ronda es una competencia grupal, la siguiente es una prueba teórica y la última es una prueba de prueba escrita. La competencia se dividirá en tres días y cada ronda tendrá una duración de cinco horas, comenzando a las 8 am y terminando a la 1 pm".

En la madrugada del día siguiente, la ola de estudiantes que aún no había superado la fiesta de la noche anterior ya había comenzado a prepararse para la competencia que se llevaría a cabo mañana.

El director Li no desperdició ninguna palabra. Ayer, todos habían jugado y dormido lo suficiente. Hoy, nadie debería siquiera pensar en estar tan relajado como ayer. Agitó su brazo como si hubiera llegado un rey y barrió los pensamientos de los estudiantes que todavía querían holgazanear por la tarde.

Cuando todo su tiempo estaba enfocado en estudiar, todos los estudiantes de repente se dieron cuenta de que el día había pasado así.

"Esta noche, todos deberían descansar temprano. ¡Acuéstese a las 9 p. m. en punto y entregue una de sus tarjetas! ¡Nosotros los maestros inspeccionaremos cada salón!" A las 5:30 p. m., después de que todos se habían ido a cenar, el Director Li tomó medidas una vez más y confiscó una tarjeta de acceso tras otra, lo que facilitó su trabajo de revisar las habitaciones más tarde.

¡En China, los maestros haciendo rondas e inspeccionando las salas era una práctica extremadamente común!

Como ayer, charlaron con los alumnos de diferentes países. Cuando mencionaron que todas las noches, los maestros irrumpirían en el salón para hacer sus inspecciones, tsk tsk tsk... Las expresiones que los otros estudiantes tenían en sus rostros, eran insoportablemente difíciles de ver, parecían como si sus cuerpos hubieran sido violados.

No podían aceptar el hecho de que los profesores habían ignorado la privacidad de los estudiantes y, sin el permiso de los estudiantes, podían irrumpir en las habitaciones sin llamar.

Luego, los estudiantes entregaron sus tarjetas sin resistirse y siguieron a los cuatro maestros al comedor para cenar.