ALFA KING

CAPÍTULO 36.-segundo fragmento

El cumpleaños de Liam estaba saliendo muy bien, Jeremy y Evangeline llegaron últimos trayendo la torta que Rosali le había encargado a la pareja, todos reían y pasaban un ameno momento viendo al cumpleañero abrir sus regalos y jugando con sus primos. Todos estaban felices, todos menos Jaime.

Salió un momento de la cabaña, Liam ya había apagado las velas de su torta y estaba divirtiéndose, nadie notaría su salida.

O eso creyó.

—¿Qué pasa? —Dylan salió tras de él—. ¿Es por Lauren?, ella está bien, creo que nunca he visto a una embarazada tan enérgica.

—Elizabeth fue vista en Japon...

Dylan quedó inexpresivo un minuto y después reaccionó.

—¿Que? —alzó un poco su voz—. ¿La atraparon?

—No —lamento Jaime—. Uno de los hijos de el alfa , la reconoció en una ciudad y el alfa mandó a rastrearla pero sin éxito.

—Confió en él —dijo refiriéndose al alfa japonés—. Sé que es fiel a la corona.

—Eso y que la odia tanto como nosotros —dijo Jaime fastidiado—. Le he dado la orden de matarla en la captura.

Dylan alzó una ceja.

—¿Oliver lo sabe? —preguntó cauteloso.

—No —suspiro—. No es necesario que lo sepa —Jaime miró por la ventana y lo vio jugando con Liam—. El rey es la esperanza y el pilar de nuestro mundo, no puede agobiarse con estos problemas.

Dylan bufo.

—Cuando te pones en ese plan, me aburres —negó con la cabeza—. Siempre haciendo lo posible para que Oliver no se ensucie, realmente me enfermas.

Jaime sonríe.

—Eres el único que puede verme de verdad —Jaime mira al suelo—. El único que sabe que hay detrás de mi máscara.

—No lo creo —Dylan se ríe—. Algo me dice que solo veo la superficie —lo empuja suavemente—. Pero esta bien, es tu manera de ser, es tu manera de demostrar tu cariño, tu manera de protegerlos, eres perfecto tal cual eres.

—Creo que al casarnos, dejamos en claro que no puedes decirle a otros hombres que son perfectos —Matt salió de la cabaña, había escuchado la última frase de Dylan.

—Yo no recuerdo haber prometido eso —Dylan posó su mano en el hombro de Jaime, este sonreía por la escena—. Además no me culpes, Jaime es ardiente.

Matt jalo a Dylan y lo abrazo cariñosamente.

—Desde ahora no quiero que vuelvas a hablar con este mal amigo —Matt lo sujetó del rostro—, y también te prohíbo elogiar a los demás.

—¿No tuvieron suficiente con su escapada? —Jaime se empezó a incomodar.

—Nunca voy a tener suficiente de mi esposo —Matt beso a Dylan.

—Está bien —Jaime se encaminó hacia la puerta—. Eso es señal para que me valla.

***

—La pase bien hoy —Lauren se sentó lentamente sobre la cama—. Los niños han crecido demasiado rápido.

—Lose.

Jaime le ayudó a acomodarse en la cama con cuidado, le acomodo las almohadas y la tapó con doble mantas porque según él, hacía un poco de frió. Beso su frente y se acomodó a su lado.