Jeon Jungkook lleva viviendo un año con él amor de su vida Kim Taehyung. Sin embargo, cuando él menor de ellos se ve involucrado en un accidente, ya nada volverá a ser como antes.
¿Podrán superar la cruda realidad? ¿Será verdad que el amor lo puede...
Me he quedado dormido sobre el hombro de Min, la espera es agotadora en todos los sentidos. También soy consciente de como me da pequeños empujones para despertarme.
Intento abrir los ojos, escuchando a la distancia, como los doctores anuncian que ingresarán a pabellón.
Me levanto de golpe, observando a las enfermeras entrar una a una, mientras los padres de Jungkook toman asiento lentamente y Min, se dedica a hacerme un sutil gesto para que guarde la calma y me acerque nuevamente a donde se encuentra ubicado él.
La cirugía me parece eterna, pensaba que todo esto sólo pasaba en series como Dr. House o Greys Anatomy pero no, la realidad es más cruda de lo que imaginé.
Dos horas después, vemos luz verde cuando él doctor sale del pabellón, buscando a la familia con la mirada para entregar los resultados de la intervención. Nos acercamos a él para que nos aclare todo de una buena vez y así poder disipar nuestros miedos.
—Él paciente respondió bastante bien a la cirugía a la cual fue sometido, no hay mayores daños, por lo menos en la estructura ósea, lo hemos sacado del coma inducido por lo que sólo debemos esperar a que reaccione nuevamente y logre despertar. Una vez suceda esto, procederemos a realizar el resto de exámenes pertinentes para descartar daños cerebrales y ver las condiciones de recuperación. Eso es todo, con permiso...
—Un momento Dr. ¿Cuándo podré ver a mi novio? —detengo su marchatomándolo por el brazo.
Él doctor se detiene y se sorprende un poco con mi actuar o quizás por lo que acabo de mencionar, en fin, se limita a sonreír posando su mano por sobre mi hombro.
—Cuando el paciente despierte se fijara el régimen de visita. Por ahora les recomiendo que vayan a sus casas y descansen. Esperemos que para mañana el panorama sea muy distinto y óptimo. Es lo único que puedo decir al respecto, con su permiso me retiro, debo atender a otro paciente.
Él Dr. se aleja, dejándonos un poco más tranquilos, al menos por ahora.
Yoongi toma de mi brazo, para luego indicarme que debo ir al departamento para descansar y me entrega un millón de razones más para no seguir en el hospital.
La verdad es que no quiero, preferiría quedarme a la espera de cualquier reacción de Jungkook, pero eso es prácticamente imposible por ahora. Sólo dejan a un familiar quedarse por día y está más que claro que la Sra. Jeon lo hará hoy.
Ella me insiste en que preferiría que cuando Jungkook despertara, yo fuese quien se quedara con él. Comprendo de inmediato e intento asimilar que es lo más adecuado, por mucho que me moleste.
Intento no pensamos más allá para no arrepentirme, de paso me comunico con Seokjin para indicarle que no es necesario que venga, que es mucho mejor si lo hace mañana. Asintiendo a cada palabra mientras hace hincapié que a primera hora, me pasará a buscar en su auto.
Él Sr. Min por otro lado, me ofrece ir por mi madre al terminal para luego irnos a dejar al departamento. Accediendo sólo porque ya no tengo fuerzas ni energía suficiente como para hacer algo más, mi cuerpo se siente tan pesado, que agradezco todo tipo de ayuda extra que me quieran ofrecer.
★ ☆ ★
Ya en el terminal y sólo tras divisar a mi madre, mi llanto se activa de forma automática, las lagrimas escurren por mis mejillas sin detenerse, empapando mi rostro mientras me aferro al abrazo firme y reconfortante que tanto me hacia falta. —Saldrá todo bien, debes tener fe, confía en él. —musita mamá, al subimos al auto.
Una vez en el departamento, mamá se dispone a cocinar algo liviano mientras Min, indica que se quedará a dormir para cerciorarse de que descanse o al menos verificar que esté más tranquilo.
Es su forma de demostrarme que soy importante para él y que por sobre todo me quiere. Me dejo consentir porque es lo que más necesito en este momento. A mi hermano, mi mejor amigo y la paz que sólo me entregan sus cálidos abrazos.
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