Jeon Jungkook lleva viviendo un año con él amor de su vida Kim Taehyung. Sin embargo, cuando él menor de ellos se ve involucrado en un accidente, ya nada volverá a ser como antes.
¿Podrán superar la cruda realidad? ¿Será verdad que el amor lo puede...
De un momento a otro los amaneceres de los domingos se sienten distintos, quizás porque no volveré al trabajo durante unas semanas, quizás porque Jungkook está durmiendo a mi lado, quizás porque sus sentimientos están aflorando poco a poco, o quizás porque está recordando varias cosas que para nosotros fueron importantes.
Hay una gran cantidad de "quizás", no obstante, no tengo la mayor idea de cual es la principal pero sin duda, todas son igual de importantes para mi.
Por otro lado, sólo las mañanas son así de alucinantes y no es que el resto sea todo lo contrario, si no que por algunos momentos siento que cuando lo tengo más cerca, segundo después, lo siento más lejos de lo que quisiera. Cuando despierta por la mañana es el único instante en que no está sufriendo una crisis, su cuerpo esta tan cansado que me permite consentirlo como si de un pequeño niño se tratase.
Su rostro lleno de expresiones difíciles de leer, constantemente batallando en aprender a discernir la realidad de lo utópico, y queriendo aferrarse a todo lo que le otorgue protección para poder liberar todas sus ataduras internas, es realmente admirable.
Estados de ánimo variantes, como si en un segundo está aquí y luego, en el otro extremo del Olimpo. Como si quisiera recordarte constantemente que estar en ese tipo de circunstancias, es prácticamente no estar en ningún lado, resumiéndose en nada.
Noto su cansancio y la guerra mental con la que lucha todos los días, y a veces desearía tener todo en mis manos para poder sanarlo, pero también soy consciente de que existen ocasiones en que simplemente no puedo hacerlo, porque escapa de toda lógica y pronóstico.
Acaricio el contorno de su rostro con la punta de mi dedo, delineando todo el contorno hasta detenerme en la pequeña arruga que se forma entre sus cejas. Luego le doy un masaje circular en la zona para relajar su expresión y proporcionarle algo de calma mientras está sumergido en un sueño profundo y reconfortante, reflejado en la forma pacífica en la que respira.
Al lograrlo, una sonrisa se planta en mis labios como si mi vida dependiera de cada cambio que logro desbloquear en él.
Abre sus ojos y detiene el recorrido de mi dedo para llevarlo al borde de su labio inferior, lo toma y lo posiciona de tal forma que deposita un beso en el, luego me sonríe y ahí me quedo, como un baboso sin poder apartar la mirada de toda su perfección.
—Buenos días, Tae. —pronuncia entre refunfuños.
—Buenos días, bebé. —entrelazo mi mano junto a la suya.
—Mañana es la fiesta de fin de año, ¿Iremos a la fiesta que preparó él amigo de Nam?. —pregunta, inquieto.
—Tú.. ¿De verdad quieres ir? —cuestiono, bastante sorprendido cuando se que aún no está del todo fuerte físicamente.
—Me parece una buena idea. Quiero seguir una vida normal y hasta ahora, mi círculo es algo reducido. —confiesa. —Me vendría bien interactuar con otro tipo de personas...
—Entonces... Si así lo quieres, iremos a esa fiesta. —respondo aún dudoso.
—¡Perfecto!. —me abraza al tiempo que arruga la nariz. —¿Supongo que nuestro panorama de hoy será estar todo el día en cama?. —señala, tras soltar una carcajada.
—¿Ya se te olvidó que invitaste a Min y Seokjin a comer?. —golpeo su frente con mi dedo, siendo lo más suave posible.
—¡Auush!. —exclama con exageración. —No lo recor... ¿Tendré que cocinar?... ¡Oh, cielos!, no quiero. —abultando sus labios en un pequeño puchero.
—No te preocupes, guapo. Iré por unas pizzas al supermercado, los chicos lo entenderán. —comento sin darle mayor importancia. —Primero me bañaré, así que puedes holgazanear un poco más entre las sábanas. —lo beso, luego me pongo de pie, tomo una toalla y me meto a la ducha rápidamente.
★☆★
Ya de regreso tras las compras, suena mi teléfono celular avisándome de un mensaje entrante. Pero antes de abrir el contenido, saludo amablemente al jardinero del condominio.
Taehyungie: <<Claro que si hyung, cuenta con nosotros>> -13:29 p.m-
Namnie-hyung: <<Por cierto, ¿Te incomoda que venga él?. Te juro que escapó de mis manos porque no fui yo quien está organizando todo esto>> -13:30 p.m-
Camino hacia el ascensor, respirando profundamente al repasar la pregunta que Nam me acaba de hacer. Intento relajar mis sentidos ante la pequeña incomodidad que estoy comenzando a sentir...
¿Qué si me incomoda?, ¡Claro que si!. Siempre me ha incomodado, pero no está bajo mi alcance evitar que esté ahí cuando es otra la persona que lo ha invitado. ¿Por qué justo ahora?, cuando todo es tan inestable.
Otro suspiro se apodera de mi, pero no es momento de atormentarse antes de tiempo. Ya pensaré en algo después, ahora debo enfocarme en lo realmente importante... Jungkook.
Taehyungie: <<¿No es cómo si cambiaran las cosas si afirmo o niego, verdad?. Nos vemos mañana, hyung>> -13:34 p.m-
Namnie-hyung: <<Tienes razón, saludos a jungkookie. Nos vemos, bonito>> -13:35 p.m-
Guardo el teléfono y abro la puerta del departamento.
A lo lejos puedo distinguir el sonido del agua de la ducha, caer. Incluso puedo distinguir un par de voces conocidas que provienen del living.
—¡Estoy en casa!. —anuncio y camino a saludar, al par de idiotas que están sentados en el sofá y que me sonríen a distancia.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Gracias a todos quienes le están dando la oportunidad a mi primer Mpreg.
