El regalo para Taehyung

5.6K 956 36
                                    

De cierta forma, me siento mucho más agitado de lo que pensé pero aún así, nada va impedir mi cometido. 

Ingresamos a cerca de diez tiendas de la última planta del centro comercial para encontrar un regalo, pero no logramos encontrar nada.

Llegado a éste punto, mis nervios y ansiedad comienzan a aumentar, es como si vieras avanzar el tiempo pero nunca llegas a puerto.

—Jungkookie cariño, estás demasiado estresado. Ya verás que lograremos encontrar algo. —intenta animarme, Seokjin.

—Jinnie hemos caminado por todos los malditos pisos y hemos ingresado a todas las tiendas. No sé, nada es suficientemente bueno. —señalo tras soltar una suspiro.

—Bueno, al menos me tienes a tu lado y eso, créeme es demasiado. —me guiñe un ojo mientras le sonrío en respuesta.

—Revisé todo el armario, los cajones, las fotografías, redes sociales, todo. Sólo para dar con alguna pista para poder elegir algo decente. —sostengo, cruzando de brazos. —Me siento tan frustrado...

—Deberías dejar de buscar así es más fácil, debes elegir lo que te dicten tus sentimientos. El valor es lo de menos, tienes bastantes ahorros, lo importante es... ¡Jungkookie!, Jungko... ¡Mierda!.

Un mareo recorre todo mi cuerpo y me lleva directo al suelo. Siento como si el mundo diera vueltas y lo poco y nada que logro distinguir, se ve mucho más pequeño y confuso. No obstante, los brazos de Seokjin impiden que llegue a golpearme, sujetándome con fuerza mientras lo escucho pronunciar mi nombre a lo lejos, antes de perder por completo la conciencia.

Minutos después y cuando logro abrir los ojos, me encuentro recostado en la camilla de una pequeña sala. Jinnie se encuentra escuchando atentamente las instrucciones de la enfermera. Intento acomodarme pero una fuerte punzada asalta mi cabeza devolviéndome a mi posición inicial, sostengo fuertemente mi cabeza con las manos debido al dolor.

Cierro los ojos mientras en mi mente se repasan pequeños vestigios de lo que creo son recuerdos. En ellos, me encuentro junto a Taehyung rodeados de naturaleza en un campo enorme, sentados uno al lado del otro con nuestras manos entrelazadas y sin apartar la vista del horizonte...





"Prométeme que me amaras siempre Jungkook, pase lo que pase".

"Te lo prometo amor, siempre juntos. Me haces tan feliz, que no hay día que agradezca que te cruzarás en mi camino. Eres todo".

"Y tu mi vida, bebé. Quisiera detener el tiempo justo en éste preciso momento. Tu y yo, siempre, aquí".

"¿Volvamos algún día?".

"Claro. Éste será nuestro lugar secreto"





—¡Arggggg!. —un grito de angustia sale directo de mi garganta mientras tomo asiento en la camilla.

La enfermera se acerca con rapidez en cuanto escucha mi quejido. —Estas en la enfermería del centro comercial. —señala la mujer. —Descuide, tómese el medicamento junto a todo el agua del vaso. —agrega, sonriendo.

De inmediato comienza a revisarme para finalmente, darme un par de calmantes. Poco a poco el dolor va disminuyendo y voy recobrando los sentidos. Jinnie toma asiento a mi lado mientras reparte pequeñas caricias por toda mi espalda.

Trago un poco de saliva mientras la enfermera indica que debo permanecer unos quince minutos más. Intento relajarme al recordar las palabras del doctor sobre distorsionar la realidad pero estoy seguro que esto ocurrió, tal cual lo recordé. Incluso se lo cuento a Seokjin, quién escucha con respeto y atención todo lo que tengo que decir.

Una vez termina el tiempo en estado de observación volveremos al centro comercial, ya más resignado en poder encontrar un regalo para Taehyung y sin poder alejar de mi mente aquella palabra que no logro familiarizar con nada.

—Jeju... —me detengo abruptamente tras escuchar pronunciar la palabra a una mujer de más edad.

Avanzo rápidamente hasta donde se encuentra mientras Seokjin reclama que no me aleje. Me acerco hasta un pequeño puesto de lo que parece ser una agencia de viajes.

—¿...Jeju?. —menciono, con duda en el rostro al no entender que me impulsa a preguntar por ello.

—¿Isla jeju?. —pregunta la misma mujer, sin esperar respuesta. —Si, tenemos pasajes para el resto del año y la mitad del próximo ¿Desea comprar o cotizar?. —continúa, volviendo la mirada a su laptop.

—Comprar... —afirmo, mientras mi corazón se acelera. —¡Encontré el regalo!. —exclamo mirando a Jinnie cuando ya se encuentra a mi lado y él, sólo se limita a sonreír mientras desordena mis cabellos.

LMA | VK Donde viven las historias. Descúbrelo ahora