Viernes (JK)

6.1K 945 240
                                    

—¿Tienes todo lo necesario Kookie?. —pregunta, Seokjin.

—Si, nada me falta. —señalo mientras tomo la última bolsa. —Gracias Jinnie. De verdad aprecio mucho que estes conmigo en cada momento. —lo abrazo, aumentando la fuerza poco a poco cuando suelta un débil quejido.

—¿Para eso están los amigos, no?. —alza una ceja al apartarnos. —Así que ve adentro y prepara todo, quiero que tengas una noche muy bonita. —indica,  revoloteando mi cabello.

Asiento tras cerrar la puerta del auto. Despidiéndome a lo lejos de Jinnie mientras me encamino al interior del edificio. Y una vez en el departamento, escondo el regalo de Taehyung bajo el colchón de la habitación de huéspedes,' y el resto, de los sobre la misma cama.

Estoy un poco nervioso, he comprado un par de cosas que no sé si serán de su agrado pero ya está, no hay vuelta atrás.

Sacudo mi cabello y me doy golpecitos en la mejilla para volver a mi estado normal. Salgo de la habitación y me dirijo hacia la cocina.

La madre de Taehyung a sido de gran ayuda últimamente, sobre todo en lo que a comidas favoritas de su hijo se refiere, incluso se toma la amabilidad de enseñarme a través del teléfono. Y eso es justamente lo que haré, poner en práctica todo él conocimiento que adquirí y poder así, sorprenderlo.

Minutos después, luego de cocinar y tener todo listo; se escucha a lo lejos el sonido de la puerta avisando que acaba de llegar Taehyung.

Ingresa rápidamente a la habitación sin pasar a saludar. Incluso ha llegado una hora más tarde de lo normal pero al menos lo suficientemente a tiempo, para que la comida esté lista. Y al cabo de unos minutos, aparece en la cocina con ropa más cómoda.

¿He dicho lo jodidamente sexy que se ve con pantalones deportivos?, ¿No?. Bueno, así es. Una vista totalmente privilegiada al ser ceñido al cuerpo.

Me da un beso en la comisura de mis labios, siendo tan sugerente como en el último tiempo. Y cuando se aleja un par de pasos para sentarse, le sonrío.

Lo observo detenidamente y es qué, desde ésta perspectiva soy capaz de comprender el porqué de tanto amor en el pasado. Es tan difícil apartar la mirada de él, cuando mi corazón late furioso con tan sólo su presencia, casi como si me estuviese enamorando....

Ok, espera. ¿Será eso?, ¿Me estaré enamorando?, ¿Podría ser que Jinnie... ¡Ahgr!, siento que mi cabeza va a explotar.

No me había detenido a barajar esa opción pero tampoco me da tiempo para hacerlo ahora. La campanilla de la cocina anuncia que todo ésta listo y con ello, disipa toda duda tras servir la comida bajo su atenta mirada.

El silencio no tarda en romperse al comenzar su pequeño interrogatorio. Me cuestiona cada vez que respondo y temo no lograr convencerlo para que mi sorpresa siga escondida hasta el final.

Finalmente logro zafar a duras penas cuando la cena acaba, aún así siento que no me ha creído del todo. Sus expresiones faciales son tan evidentes que en estos meses, se ha convertido en un libro abierto para mi.

Se ofrece a lavar los platos, servicios y copas utilizados, permitiéndome así preparar la sorpresa antes de que acabe. Ingreso a la habitación con los nervios de punta y calándose por toda mi piel, extremando mis emociones. No es para nada fácil, pero tampoco puedo dar marcha atrás.

Cierro la puerta con pestillo para poder detener su ingreso, dirigiéndome a la cajonera para tomar la prenda. Respiro profundo para armarme de valor y al poco tiempo, me visto con la sugerente prenda interior. Luego tomo prestada una de sus camisas y termino por cubrirme sin abotonarla.

La prenda me queda más ceñida de lo que imaginé pero supongo que no debo verme tan mal, Jinnie ha dicho que el negro contrasta muy bien con mi piel, quiero confiar en ello.

Es extraño pero sí, estoy a punto de seducirlo. ¿Por qué?, ni yo mismo lo entiendo pero es lo que más quiero.

Una vez listo, comienzo a encender las velas aromáticas que compré para darle un aire mucho más íntimo. Y cuando al fin termino con la última, se escucha un pequeño forcejeo seguido de unos golpecito en la puerta.

Apago las luces mientras llama mi nombre y una vez cerca del umbral, quito el pestillo para que pueda entrar.

Avanza lentamente observando todo a su alrededor. Tan atrapado en lo que ven sus ojos, que no ha notado que estoy tras él. Pero antes de que diga algo, me apresuro a tapar su campo visual con mis manos mientras susurro sobre su oído, aquella frase que mi amigo planeó por mi. —Quiero ser suyo, Señor Kim...



Sólo voy a aclarar que JK no se va a poner ropa de mujer

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




Sólo voy a aclarar que JK no se va a poner ropa de mujer. No me gustan esas cosas :)!

LMA | VK Donde viven las historias. Descúbrelo ahora