Invocación: Anne Bonny y Mary Read

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Mujeres de la Edad de Oro de la Piratería

El Diario de Midoriya Izuku

En mis experiencias con Chaldea hasta ahora, creo que he podido agrupar a los Servants que he convocado en dos categorías principales.

El primer grupo son las fuerzas de paz. Los que generalmente son serios y se enfocan solo en sus objetivos principales, cualquiera que sea. Dentro de este grupo también hay una variedad de motivaciones.

Hay quienes desean mantener la paz y la estabilidad para todos y, por lo tanto, darán un paso al frente para ayudar si surge una crisis dentro de Caldea. Georgios es un buen ejemplo de eso, con la forma en que ayudó durante el incidente con Gilles y el Fantasma. Monsieur Sanson también, por la misma razón. En el otro extremo están aquellos que en su mayoría simplemente se quedan callados y no están realmente interesados ​​en mover el bote metafórico. Héctor es un caso de eso, ya que realmente no ha hecho mucho para sobresalir o causar un alboroto desde que llegó.

Mientras tanto, está el segundo grupo, que generalmente se consideran los alborotadores. Los que suelen ser declarados culpables cada vez que pasa algo que no debería.

En el otro extremo de ese grupo están aquellos que podrían considerarse activamente peligrosos. Hay una buena razón por la que Gilles se ha mantenido en su clase Saber durante todo este tiempo, sin atreverse a usar su Caster.

Por otro lado, están los que son más traviesos. No es realmente malicioso, pero no obstante puede causar algunos problemas menores.

Jing Ke puede caer en esta categoría, a veces. Pero otro ejemplo es quién decidió acompañarnos hoy.

Ambos.

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La energía mágica estalló desde el círculo de invocación con toda la fuerza y ​​la falta de sutileza de una ola del océano, y aquellos que observaban los procedimientos se quedaron con la respiración contenida. El número de convocatorias esperadas de Okeanos había disminuido, e hicieron todo lo posible para prepararse para los que quedaban, incluso si no había mucho que hacer.

Izuku observó el flujo de maná mientras se armaba de valor con anticipación. Por lo general, el elemento que aparecía del géiser de energía serviría como una pista sobre quién estaba a punto de aparecer, por lo que una vez que recibiera esa señal, sabría cómo reaccionar. Probablemente más oro si era Drake, o algún tipo de efecto mágico si era Medea. Fuera lo que fuera, le diría para qué prepararse y qué plan llevar a cabo.

Drake no sería un problema real, siempre y cuando ella y Barbanegra no comenzaran a pelearse nuevamente. Medea o Jason serían un poco más problemáticos. Tendría que tratar de mantenerlos separados ante todo; si Medea terminaba actuando de la misma manera que lo hizo en la Singularidad, se iba a poner feo muy rápido. Jason era un problema si su ego no se controlaba, pero si él y Heracles eran tan cercanos como creía, este último podría evitar que se excediera. En el caso de Medea, idealmente Atalanta podría disuadirla de cualquier acción drástica, pero estaba por verse.

Quería creer que no había nada de qué preocuparse para empezar, que cualquiera que él convocara jugaría a la pelota y no causaría problemas. Al mismo tiempo, había habido casos en los que no se había preparado y volvían a morderlos a todos. Ya era hora de que se hiciera cargo de eso.

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