|2 0 : 1 7| ¿Hasta cuándo?

La perdida (Transmisión 8).

(Escuchar canción en multimedia)

Capítulo XXXVII

La mujer a mi lado comienza a tararear una canción, es fácil identificarla, es la hermosa melodía que siempre aparece al final de las transmisiones de 20:17. Ahora las estrellas ya están en el cielo brillando. Las estrellas nos sonríen a nosotros dos con alegría y cariño, pues, después de mucho tiempo, por fin podremos escuchar juntos a 20:17. Así es, Dakota y yo estamos en el mirador, a unos minutos de escuchar la voz angelical de esa mujer, de 20:17.

—Enciende la radio, está a punto de comenzar— me insta Dakota mientras se enreda en la cobija que le he dado. Así es que escucho sus palabras y enciendo la radio en la estación 20.17 a las 20:17. En cualquier segundo la señal dará rienda suelta a una voz mágica, una voz que sin duda, me cala hasta los huesos.

Y entonces llega el momento que todos hemos esperado en el día. De pronto, la estática suena y la voz de 20:17 comienza a retumbar en mis oídos. Pero antes de todo, me acerco a Dakota y comienzo a abrazarla.

—Sin duda todos odiamos perder algo. La perdida y los corazones heridos son lo único que el ser humano no ha podido superar a su totalidad. Porque el vacío que deja en ti la perdida... tarda mucho en volver a sanarse, en volver a... llenarse. Ahora entiendo y creo ciertas las palabras que salen de boca en boca: "no te das cuenta de lo que tienes, hasta que lo pierdes". Tanto personas, como objetos nos enseñan ese valor hermoso que tenían después de irse. Hace muy poco perdí a mi Astro... no cabe duda que eso me ha dejado totalmente devastada. Perderlo ha sido algo doloroso. Ahora no me queda nada más que decirles que amen, que disfruten y valoren todo lo que tienen... mañana ya no podría estar con ustedes— los sollozos de 20:17 llegan a mis oídos. Llegan como balas destructoras, pues de a poco mi alma desmoronan.

De pronto siento como mi hombro comienza a mojarse. De nuevo las lágrimas de Dakota se enjugan en mí. Sí tan sólo 20:17 supiera que ambos también hemos perdido algo. Dakota a su madre y yo estoy a punto de perder a mi mejor amigo. Sólo espero que le hayan dejado la radio cerca, para que él también se sienta pleno al escuchar a esta mujer.

—No sé si esto llegue al corazón de alguien, pero estoy más que segura que todos hemos perdido algo en algún momento. Pensar en ello y reflexionar nos va a ayudar mucho. Aunque lo cierto de todo es que la vida no se acaba cuando lo pierdes, eso está más que claro, por eso debemos de ser fuertes y seguir el paso veloz de la señora vida. No me queda nada más que decirles, que 20:17 está llegando a su fin, una transmisión más y este mundo que hemos creado, se va a terminar— la estática llega a mis oídos y de nuevo esa melodía hermosa. Pero Dakota y yo nos quedamos en silencio por algunos segundos.

—La última— comento en un susurro, que sin duda llega a los oídos de Dakota.

—La última— confirma lo antes dicho y nos quedamos abrazados un poco más de tiempo. Porque todos hemos perdido algo, y porque pronto perderemos a ese ángel llamado 20:17.

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Nota de la autora:

Perfecto. Esto es muy curioso, la mayoría de las personas me había dicho que Dakota era 20:17, ¿aún siguen creyendo lo mismo? Digo, ambos la escucharon juntos. Quiero saber sus teorías.

Canción: 20:17– Ólafur Arnalds

El siguiente capítulo es muy lindo. Otra de las bellas conversaciones que Dante y Barry tienen. Ya estoy muy emocionada porque sepan el final de esta historia. Por eso me daré prisa en subir capítulos.

Gracias por seguir aquí. Les mando un fuerte abrazo.

Atte.
D.R