Andrómeda sin misterios.

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Capítulo XL

Mi madre no para de llorar en ningún momento. Como ella me lo ha dicho, ella cree que fue su culpa. A decir verdad, no creo que se pueda perdonar algún día, pero, dejemos que el tiempo lo cure todo. Mi madre ha pedido entre sollozos que la deje sola, por lo que le hago caso y subo hasta mi guarida, mi habitación.

Mientras subo las escaleras, no saco de mi cabeza la expresión de desesperación que surcó su rostro cuando le expliqué que sí era el cuerpo de Keneth Collins. Vaya perdida que hemos tenido, mi padre está muerto. Aunque trato de subir las escaleras sin hacer mucho ruido, por un poco de honor a él y porque seguramente Hillary ya está dormida. Desde la muerte de la madre de Dakota, le hemos conseguido otra niñera, la cual no le agrada mucho a mi hermana, pero Dakota ahora no puede.

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Entonces me lanzo a la cama, gracias a eso, y claro, también a mi peso, la mochila que estaba en la cama, se cae. Ahora todos mis libros yacen en el suelo. Aunque lo que llama más mi atención, son las nueve notas esparcidas en la alfombra de mi habitación. ¡Cierto! Ya me había olvidado de ellas, además, ya tengo la última nota de todas. Por lo que, como un loco, las recojo todas. Ahora es momento de resolver el misterio.

Así es que me pongo de pie y me vuelvo a sentar en la cama. Coloco las nueve notas de color amarillo en orden, de la primera a la novena. Es fácil hacerlo, ya que les he puesto números. Y entonces comienzo a leerlas todas:

1.

¿Y si los sentimientos no existieran? Entonces seriamos almas gemelas

Andrómeda

¿Almas gemelas? Bien, las almas gemelas son las personas ya destinadas para ti. Y estoy más que seguro que ya he escuchado eso en la voz de alguien. O más bien dicho, lo he escuchado en dos voces. Así es que a la mente me llega la voz de Lilly. Ella hizo referencia a las almas gemelas cuando intentó pedirme disculpas.

«—Sentí como el suelo vibró en ese momento, como si dos almas gemelas se hubieran encontrado en el basto universo—»

«—Sentí como el suelo vibró en ese momento, como si dos almas gemelas se hubieran encontrado en el basto universo—»

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Dos almas gemelas en el basto universo. Esas fueron sus palabras textuales, no me pregunten cómo es que lo sé, quizás es la magia de la literatura. Sin embargo, volviendo al tema, no puede ser Lilly, ella ya encontró a su alma gemela. Aunque recordando bien las fechas, la primera nota me llegó antes de que ella viera a Dorothy en la obra. Quizás al principio si era yo su alma gemela, lo que no entiendo es porqué siguió mandándome las notas a mí. De pronto a la mente me llega la segunda voz que escuché hablando de almas gemelas. Dakota.

«—Dante... ¿no me quieres de esa manera? Creí que podría conseguirlo. Siento que ambos somos almas gemelas—.»

|2 0 : 1 7| ¿Hasta cuándo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora