La Conquista. [TERMINADA]

20. No todo es lo que parece. (parte 1)

este capítulo esta dividido en dos, en este narra Mackenzie y en la segunda parte narra Sawyer❤️

MACKENZIE.

La señora Marshall piensa que no puedo verla. Empiezo a creer que realmente piensa que es invisible, o simplemente no le interesa que me moleste. No me gusta cuando los padres —aunque en este caso abuela—, espíen las tutorías. Al menos, no siendo tan obvios. Me hace sentir una presión más grande, como si estuviera haciendo algo mal todo el tiempo, me hace dudar hasta cuánto es dos más dos.

Josh vuelve a preguntarme algo que pensé que había quedado claro hace media hora. Asiento y vuelvo a explicarselo con paciencia e intentando ignorar los ojos de la señora Marshall a mis espaldas.

Me gusta enseñar, me gusta estar rodeada de niños. No me gustan los padres metiches... abuelas, en este caso.

—¿O sea que tengo que usar esta formula siempre que tenga un problema de este tipo? —inquiere Josh mientras apunta con su lápiz su tarea de matemáticas.

—Sí. Aunque tienes que tener cuidado con los signos y de qué manera ubicas los números. No siempre van a estar en orden. Por ejemplo, el coeficiente cuadrático, ese que está elevado al 2, puede estar al final y el termino independiente en el medio —le explico al mismo tiempo que señalo la ecuación de la que estoy hablando—. Esto es como jugar al jenga. Si empiezas apilando mal, va a terminar cayendose. Si empiezas ordenando mal los numeros, no te dará el resultado.

—Ah, okey —asiente Josh y se pone a hacer la ecuación que sigue.

Nos conocemos hace meses y sigue sin haber una sonrisa por su parte.

Apoyo mi espalda en el respaldo de la silla y volteo sobre mi hombro para mirar a la señora Marshall. Ni siquiera se molesta en disimular que no estaba mirando. En cambio, hace lo que siempre pido que no hagan. Se acerca y se sienta en la silla libre a mi lado.

Por suerte, Josh no se inmuta y continua con su trabajo.

—Mackenzie, ¿qué piensas hacer después de la universidad? —me pregunta en esa voz rasposa que delata todos los cigarrillos que debe fumar por día.

Elevo mis cejas, en una señal de "señora, váyase. Estoy intentando trabajar". Sin embargo, la señora Marshall es una mujer insistente.

—Podemos hablar mientras Joshy está haciendo su tarea —dice.

Aclaro mi garganta.

—Quiero trabajar como psicóloga en una escuela primaria —respondo. Y es la verdad. Aún me quedan dos años de universidad, si es que todo sale bien, y si todo termina saliendo como yo espero, mi plan es aplicar en escuelas para trabajar cerca de niños.

—Qué interesante —asiente ella—. ¿Por qué no enseñando? Se te da bien.

Entreabro mis labios, con la respuesta en la punta de mi lengua pero luego me arrepiento. No quiero distraer a Josh y menos contarle traumas infantiles a la señora Marshall.

—Me interesa más la psicología —respondo finalmente. Carraspeo y vuelvo mi atención en Josh. La ecuación le sale bien, y si sigue así, el resultado tendría que darle cero. Espero paciente a que termine.