Las Secuelas De Amarte (EPDA Version)

¥Capitulo 11¥

Capítulo 11: Golpes de vida.

1 de Junio del 2024.

Karol S.

—No estoy lista para esto.

Veo las cajas a mi alrededor y quiero salir corriendo, respiro profundo mientras niego constantemente. Mimi me ve mira alarmada mientras deja las cajas con mis zapatos a un lado.

—Oh no, no vamos a tener otra crisis —niega rotundamente halandome para que me siente en el banco de mi tocador.

—No estoy lista para esto —insisto—. No puedo hacerlo.

—¿Qué? ¿Ya no te quieres casar?

—¡Si quiero! —sollozo tapándome el rostro.

—¡¿Pero por qué lloras?!

—¡Porque no me quiero mudar! —me lamento.

—¿Te llamo a la psicóloga?

—¡No!

—¡¿Y qué hago?!

—¡Déjame llorar!

Mirian resopla dejándose caer en el borde de la cama teniendo una lucha interna de si seguir empacando mis cosas o esperar que se me pase la crisis.

Me casaré prácticamente en dos semanas y estoy colapsado.

Entre los preparativos de la boda, las producciones de mis canciones, eventos, citas, sesiones de composición, los ensayos para mi presentación, el estreno de mi colaboración, los transmite y mi mudanza me estoy volviendo loca. Estoy manejando un nivel de estrés que me tiene ultra sensible y ahora colapso por cualquier cosa, no estoy en mi momento más estable.

—Pero ... ¿qué pasa? —mamá entra a la habitación y lloro más fuerte.

—Disque que ya no se quiere mudar.

Mamá me ve y le hago un puchero. Okay, tampoco esta siendo fácil para mi el tener que mudarme, si he estado aplazado ese suceso no es porque ame el departamento es porque realmente me cuesta aceptar la idea de que mamá y yo ya no viviremos juntas, no me gusta la idea, no me gusta pensar que la dejaré sola, somos inseparables y aunque se que pretende que no le duele, sé que también está sufriendo porque me iré.

—Mi amor —mamá viene a abrazarme—. Ya hablamos, pensé que todo ya estaba bien.

—Es que no quiero dejarte.

—Pues yo tampoco pero es lo que toca hija, en algún momento iba a suceder. Ya nos toca independizarnos de la otra.

—Ya sé —seco mis lagrimas con el cuello de mi suéter—. Es que son muchas cosas.

—Sé que estás estresada por todo y que son muchos cambios pero ya Andrea y yo te hemos cuadrado todo para que vayas con más calma y botes todo ese estrés, ya en nada va a ser la boda y tienes que estar feliz.

—Lo estoy, pero no quiero dejarte sola.

—No estoy sola, sólo te cambiarás de casa hija no te irás del país. Además, yo voy a estar bien, te sigo teniendo a ti, a las chicas, a Mimi , a Asier y me mantengo viajando a Mexico. Voy a estar bien.

—Lo dices para que no me sienta mal.

—Te digo la verdad. Pero hagamos una cosa, sólo llévate lo que creas necesario y deja el resto de tus cosas aquí porque esta seguirá siendo tu casa y siempre voy a mantener tu habitación.

—Es verdad güera, tu ve a tu paso y tranquila que aquí la Caro y yo nos la arreglamos y pasamos bomba ¿o no?

—Exacto, mira cuantas cosas lindas te están pasando hija, si lloras que sea de felicidad.