¥Capitulo 36¥

1.4K 77 33
                                    


Capítulo 36: Nuestro Hogar.

14 de Mayo del 2025.

Karol S.

De ninguna maldita manera.

—¿Qué? ¿Y por qué no?

—Muy creativa tu idea, pero no me tienta nada que nos arrojemos nuestras guitarras —sigo negando—. Ni que fuéramos al Super Bowl.

—Dale que no va a pasar nada.

Cruzada de brazos sigo negando, generalmente yo soy la de las ideas extremas pero en estos ensayos Ruggero me está superando y es que quiere tirar la casa por la ventana.

—Pueden pasar muchas cosas, como por ejemplo: que uno falle y la guitarra termine en el piso o en nuestras cabezas e iríamos directito al hospital... O quizás termine golpeando a alguien del público y nos demanden.

—Wow, está cabecita si que es creativa y negativa —le da unos toquecitos a mi frente y ruedo mis ojos—. Lo haremos.

—Que no —retrocedo unos pasos negando. Él toma su guitarra—. Mejor empecemos a ensayar.

Me giro para ir hasta mi lugar que queda al otro lado del estudio—. Karol.

—¿Qué? —al girarme me encuentro con su sonrisa maliciosa.

—¡Piensa rápido! —exclama antes de lanzarme la guitarra, mi primera reacción es gritar horrorizada y luego logro atrapar el objeto entre mis brazos antes de que se estrelle contra mi—. ¿Ves? Muy fácil.

—¿¡Estas loco!? —chillo aferrando el instrumento de cuerdas contra mi pecho que se sacude ante mi agitada respiración.

—Mira como lograste atraparla de rápido. Eso se llama velocidad de reacción, —me señala— y es lo que utilizaremos en los shows. Ahora solo falta que tu también la lances al mismo tiempo y será perfecto.

Entrecierro mis ojos dedicándole una mirada resentida—. Deberia de romperte la guitarra en la cabeza.

—Pero no lo harás porque me amas —me hace ojitos de inocencia—. Lo haremos ¿verdad qué sí?

—Si alguien termina en el hospital o me quedo sin mi única guitarra te mato —advierto.

—Trato hecho —sonrie con victoria —. Y ya suelta mi guitarra que no se irá volando si lo haces.

Bajo la mirada hasta ella y aflojo mi agarre, camino hasta él entregándosela bajo su burlona mirada. Le muestro mi dedo corazón antes de volver nuevamente a mi lugar —. Simplemente encantadora.

Le doy una sonrisa sarcástica antes de ir por mi propia guitarra, me ubico frente al trípode que sostiene mi micrófono para continuar con nuestros ensayo que fue interrumpido por su idea suicida de guitarras voladoras.

En medio de nuestro pre-ensayo, llega la banda, el coro, Pedrito y Lucas cosa que nos lleva a empezar oficialmente por suerte porque siento que si pasaba más tiempo Ruggero seguiría derrochando más idead y yo sola no puedo lidiar con él así que me siento más apoyada.

Las primeras dos horas resultan bien, ambos estamos contentos con el hecho de la fusión entre nuestra gente que han sabido comprenderse, todo hasta el momento ha sido fácil en ese sentido pero eso no quita el hecho de todas las cosas pendientes que tenemos por delante. En el primer descanso que tenemos no dudo en tirarme en el sofá para abrazar a Daissy que por supuesto es mi acompañante del día.

—La vas a asfixiar —señala Ruggero sentándose en el borde del sofá.

—Ella esta bien —aseguro bajo la mirada preocupante que le da a mi mascota que esta acurrucada contra mi pecho.

Las Secuelas De Amarte (EPDA Version)Where stories live. Discover now