Capítulo 63

178 29 14
                                    

Me pidieron una entrevista en un famoso programa de televisión, me sentía nerviosa pero muy emocionada. Esperaba que todos los que no habían creído en mi, me mirarán triunfando.

Mientras esperaba mirando mis uñas, me indicaron que el momento de la entrevista había llegado. Saludé a la conductora y me senté frente a ella en un cómodo sillón.

- Bien, ahora tenemos con nosotros a Elisa Montiel Cicolinni famosa pianista prodigio miembro de la Real Orquesta Filarmónica ¿Cómo te sientes?- Preguntó.
- Me siento muy emocionada y agradecida por lo que he logrado- Respondí con una sonrisa.
- No es para menos, tienes que estar muy orgullosa de lo que haz logrado. Pero ahora hablemos un poco más de ti ya que la gente está ansiosa por conocerte, cariño. Tengo entendido que eres nieta de la también famosa pianista Eleonora Obregón.
- Así es, ella es mi abuela y estoy muy orgullosa de eso- Respondí.
- Me imagino que los genes te favorecieron mucho, ella en su tiempo fue una de las intérpretes más famosas y ahora tú la estas sucediendo por así decirlo, pero ahora cuentame, supe que vienes de una familia de escasos recursos ¿Qué fue lo que pasó?- Preguntó.
- Aunque mi madre vivía de la fortuna de mi abuela cuando era pequeña, se enamoró de mi padre Erick Montiel que en paz descanse...- Hice una breve pausa- Él era un humilde panadero, pero nos dio todo lo que pudo mientras estuvo con nosotras.
- Cuánto siento lo de tu padre- Dijo la conductora- ¿Él tuvo algo que ver con tu gusto por la música clásica?- Preguntó.
- Sí, a mi me gustaba ver en la televisión los programas de música clásica y me pasaba horas escuchando, entonces mi padre al ver que me fascinaba ese tipo de música, me compro varios discos con canciones de Beethoven que es mi compositor favorito. Así que podría decir que él fue quien alimento este gusto que tengo- Respondí.
- Eso es excelente, los padres siempre tienen que apoyar a sus hijos, sin embargo tú padre no podía costearte una escuela de música ¿Cómo te sentías?
- Yo sentía que nunca iba a poder cumplir mi sueño, lo veía como algo muy lejano. Cuando íbamos a reuniones familiares mis primos me decían que de grande sería una criada o algo relacionado, así que eso hizo que mi esperanza muriera poco a poco- Respondí.
- ¡Qué triste! Ya me imagino lo que piensan tus primos de ti ahora, les diste una bofetada.
- Eso creo- Reí.
- Bueno entonces dime ¿Cómo aprendiste a tocar el piano?
- Todo fue gracias a mi abuela, sin si apoyo yo no habría logrado esto. Habían pasado muchísimos años desde que habíamos visitado a mi abuela, ya que ella vivía en otra ciudad así que fuimos y mi padre me dejó quedarme unos días más, fue entonces cuando mi abuela comenzó a enseñarme con mucho cariño a tocar el piano, sin embargo cuando mis padres regresaron por mi pensé que todo se había acabado, y en parte fue así...- Hice una pausa- Pero de un modo que no había pensado nunca... Mis padres tuvieron un accidente automovilístico al ir al supermercado, ahí fue cuando mi padre murió- Unas lágrimas rodaron por mis mejillas- Al morir mi padre me quedé a vivir con mi abuela.
- Me imagino que el dolor que sentías al perder a tu padre fue el motor para seguir adelante y aprender a tocar el piano.
- Sí, así lo fue- Respondí- Poco después mi madre me abandono y me quede huérfana por así decirlo.
- ¡Dios mío! ¿Qué madre hace eso?- Preguntó- Estoy indignada ¿Te mantienes en contacto con ella?
- No, ella solo se ha aparecido en algunas ocasiones- Respondí.
- ¡Que triste! Me imagino que eso fue muy duro para ti, y más porque eras prácticamente una niñita. Entonces al quedarte con tu abuela, ella comenzó a dedicarse en tu educación musical ¿No es así?- Preguntó.
- Sí, ella fue mí único apoyo en eso por algún tiempo, mi abuela me enseñaba en casa pero después me inscribió a una escuela de música donde gracias al profesor Erick Guevara comencé a formarme como músico- Respondí.
- Por ahí corren rumores de que ese profesor impulso tu carrera porque estaba enamorado de ti ¿Es cierto?- Preguntó.
- Sí, aun cuando yo era una niñita él me besaba y me decía que era nuestro secreto, yo solo podía sentirme muy confundida.
- ¡Qué falta de profesionalismo! ¿Haz pensado en tomar acciones legales contra él?- Preguntó.
- No lo había pensado- Respondí simplemente.

No podía hacerlo...

- Bien, después de que ingresaste a esa escuela aprendiste muy rápido a tocar el piano y comenzaste a tener mucho éxito, desde los 12 años fuiste considerada prodigio del piano y ahí fue cuando también comenzaste a crecer, es decir ahora pasaste de ser una niña a ser una adolescente e incluso a tener problemas de salud, pero de eso hablaremos después de una breve pausa- Comenzó a dirigirse al auditorio- En unos momentos volveremos para seguir hablando acerca de la historia de Elisa Montiel Cicolinni, una historia de superación que debemos conocer.

La que sueña con BeethovenWhere stories live. Discover now