Después de transmigrar la esposa gorda hizo reaparición

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Incluso algunas de las plantas de maduración tardía, como las judías verdes y el apio, ya estaban listas para la cosecha.

Ya estaba experimentando algunos primeros síntomas de embarazo, pero la suerte fue que no tenía náuseas. En cambio, tenía muy buen apetito y quería comer todo lo que estaba a la vista.

Para poder comer frutas frescas, también había plantado algunas frutas en el patio. Había fresas, moras, uvas y cerezas.

Las fresas en el patio habían crecido densamente y uno podía ver un campo de frutos rojos de un vistazo. También fue gratificante ver los racimos de uvas colgando de las ramas y las moras creciendo tan bien que parecía que la provisión no tenía fin.

Estas frutas hicieron que Qiao Mei se sintiera aún más feliz que antes.

Qiao Qiang se paró en el patio y miró las frutas que crecían por todo el patio, sintiéndose perplejo.

¿No hay demasiadas frutas este año? Los comemos todos los días, pero parece que no podemos terminarlos todos. Los frutos siguen creciendo.

Las verduras del patio también crecían excepcionalmente bien.

El almacén, que originalmente se usaba para cultivar brotes de soja, ahora tenía postes de bambú colgados por todas partes con el suministro aparentemente interminable de uvas colgando densamente de ellos. Este lugar ahora se usaba para secar las uvas en pasas. Cuando las pasas estén listas, serán un bocadillo delicioso.

Qiao Mei estaba aburrido e incluso usó las uvas para hacer un poco de vino.

Hizo el vino especialmente para Qiao Qiang, a quien le gustaba beber pero tenía problemas gástricos. Cada vez que bebía a escondidas algunos tragos de licor, tenía malestar estomacal durante unos días.

Qiao Mei elaboró este vino para satisfacer los antojos de Qiao Qiang.

Este vino se hizo con la energía del colgante de jade, por lo que estaba naturalmente lleno de energía espiritual y sería beneficioso para la salud. Incluso si no pudiera ayudar a nutrir el estómago de Qiao Qiang, no debería hacerlo sentir incómodo, ¿verdad?

Después de cosechar las verduras y frutas en el patio delantero, caminó hacia el patio trasero y comenzó a alimentar al ganado allí.

Los pollitos y los patitos se habían vuelto grandes y gordos, y los lechones también habían crecido bien. Podían comer una gran cubeta de comida en cada comida y jugaban en el corral todo el día, por lo que todos habían crecido mucho más.

Qiao Mei incluso demarcó una zona para este ganado. Su zona de actividad era un área que estaba delimitada y rodeada de vallas, y parecían lo suficientemente inteligentes como para saber que la zona era su territorio y que no debían dejarla sola.

…

Qiao Mei de repente sintió hambre. Tomó un balde grande y una gran red de pescar, junto con una pequeña bolsa de pasas, y caminó hacia un estanque.

A los peces cercanos les gustaba comer estas pasas. Mientras arrojara un poco al estanque, siempre podría obtener una red llena de peces.

Qiao Mei regresó con un gran cubo de pescado y se acercó para sacar dos grandes. Ella cocinaría estos dos pescados más tarde. En cuanto a los peces restantes, usaría la mitad de ellos para hacer una sopa nutritiva para ella y convertiría la otra mitad en bocadillos de pescado seco para enviárselos a Xia Zhe.

Qiao Mei se paró en el lugar y sonrió, pensando que Xia Zhe estaría muy feliz de recibir los bocadillos de pescado seco.

“Mei Mei, sal y mira quién está aquí”, pasó la tía Dong y gritó hacia el patio. Había un toque de rareza en su voz.