Té para tres (TERMINADA)

032- Lágrimas y caricias

Lauren

Lauren sorpresivamente estaba haciendo el desayuno un domingo, a pesar de que fueran las 2 de la tarde, nunca era mal momento para desayunar.

Michael le había enseñado a hacer pancakes y quería sorprender a sus amigas con el desayuno, no solía cocinar con frecuencia, aquello era todo un acontecimiento. Sabía que Olivia no estaba en casa, sin embargo, esperaba que llegara pronto para poder probar sus deliciosos pancakes.

No sabía como sería el desayuno en su departamento ese día, pues Olivia y Colette habían tenido una fuerte discusión en la fiesta de Louise la noche anterior. Sabía que ambas estaban molestas con la otra y no las culpaba, ella también estaba un poco molesta con ambas, pero sobre todo consigo misma.

La presencia de una persona la sacó de su ensoñación y se encontró con Colette en medio de la sala. Llevaba el maquillaje corrido y el mismo vestido de la noche anterior, sus ojos estaban enrojecidos e hinchados. El día anterior, Colette se había encerrado en su habitación apenas llegar al departamento, ni siquiera había querido escuchar a Thomas que había tocado a su puerta por 20 minutos. Pobre chico, aún no entendía que cuando Colette decía no, no había nada que la hiciera cambiar de opinión.

Lauren le sonrió a Colette y le pasó un plato lleno de pancakes con miel de maple y fresas. Colette negó con la cabeza y se sentó en una de la sillas de la barra.

-No tengo hambre- dijo Colette con un hilo de voz.

-Están buenas, te lo juro- Lauren dejó el plato frente a ella- Prueba un poco. Te gustarán.

-No quiero, gracias- dijo Colette con un tono fuerte.

Lauren se encogió de hombros y se sentó junto a Colette a comerse sus pancakes.

-Tú te lo pierdes- le recordó a Colette. Era mejor no presionarla

Se llevo un bocado a la boca y se dio cuenta de que a los pancakes les faltaba azúcar, le agregaría más azúcar a la próxima. Puso un poco más de sirope sobre sus pancakes, nada mejor que el azúcar.

Se concentró en comer sus pancakes hasta que sintió a Colette sollozar a su lado. Dejó el tenedor y miro a su amiga con cautela. Colette tenía la cara enterrada entre las manos y sollozaba con fuerza.

Lauren puso una mano en su espalda y comenzó a acariciarla. Colette necesitaba el tacto de alguien para calmarse. Lauren se levantó y fue por un vaso de agua. Lo dejo frente a Colette y le comenzó a organizar el cabello con cuidado.

Colette por fin dejó de llorar y levantó el rostro. Las lagrimas aún caían por su rostro y su cara estaba enrojecida. Cuando Colette lloraba se le hinchaban los labios, parecía que se los hubiera rellenado con Botox cada vez que lloraba. Lauren no pudo evitar soltar una leve carcajada. Colette hizo caso omiso a ella, en ese momento Lauren supo que Colette se estaba sintiendo realmente mal.

-¿En verdad soy tan egoísta?- le preguntó Colette- ¿De verdad solo me preocupo por lo que me pasa a mi?- había vuelto a llorar con fuerza. Las palabras salían entrecortadas- Yo pensé que yo... que ustedes... que era mejor si no me metía en sus vidas.

La dura verdad impactó a Lauren con fuerza. Colette sentía que no era merecedora del amor ni el apoyo de sus amigas. Creía que era mejor alejarse.

-No. No Coco- le dijo Lauren con palabras dulces- Nada de eso.

-Olivia dijo...

-Olivia tiene mucho en lo que pensar- le recordó a Colette- Al igual que nosotras. Recuerda que estaba borracha.

-Los borrachos dicen la verdad- dijo Colette. Se limpiaba las lágrimas con las manos. Su rostro estaba lleno de maquillaje.

-Pero Olivia nunca expresa nada de lo que piensa- le dijo Lauren- A lo mejor es lo que siente, pero eso no quiere decir que sea verdad.