¡𝙽𝚘 𝚜𝚘𝚢 𝚞𝚗 𝚘𝚖𝚎𝚐𝚊! 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘

⊹ 33 ⊹

—Hijo, ¿en dónde has pasado la noche? — preguntó mi padre tan pronto se encontró conmigo en las escaleras de la mansión.

—Amor, no seas imprudente— habló mi madre —Posiblemente haya estado con Hyunjin.

—Es cierto— el hombre sonrió abiertamente. —Parece que tuvieron un momento agradable.

"Estúpidos entrometidos", pensé con amargura.

—Claro— murmuré.

—Por cierto, ¿cómo van las cosas con Christopher Bang? — preguntó mi padre.

"Increíblemente mal, me dio un delicioso orgasmo y tan pronto traje a colación su aroma, huyó de mí como si tuviera peste", pensé.

—No he encontrado nada fuera de lo normal— admití —Todo está en orden.

—Es sospechoso, pero confiaré en lo que dices, puedes ir a tu habitación.

Tras hacer una reverencia, continué subiendo las escaleras y rápidamente me encerré en mi habitación en un intento estúpido de huir de todos los problemas que están próximos a aparecer.

Mi celular comenzó a vibrar, lo saqué de mi bolsillo y atendí la llamada.

—¿En dónde estás?

—En casa.

—En casa— repitió —Minho, tenemos examen hoy, ¿no piensas venir o qué? — preguntó Felix con tono molesto.

—¡Mierda! — miré el reloj. —¡Llego en cinco! — y finalicé la llamada.

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—No me pareció tan difícil el examen— dijo Felix tan pronto tomamos asiento en una de las bancas del jardín trasero.

—Tienes razón— concordé —, sin embargo, tengo la ligera sensación de que, no me irá tan bien.

—A juzgar por tu patético aspecto, parece que no has dormido bien, ¿qué sucedió?

—Yo...

—¡Minho! — el llamado de Hyunjin me hizo dar un salto involuntario. Me giré hacia él y me quedé helado tan pronto lo vi acercarse con un hermoso ramo de rosas rojas. —Es para ti— sonrió abiertamente, sin embargo, sentí que no era del todo sincero. —¿Podemos hablar a solas?

—¡Yo me voy! — Felix se alejó a paso rápido después de ver la cara larga de Hyunjin.

—¿Qué pasa? — pregunté con curiosidad. Hwang tomó asiento frente a mí y tras dejar el ramo de rosas sobre la mesa, dijo—: Necesito que me aclares unas cuantas cosas. Primero que nada, ¿por qué no fuiste a dormir a casa?

—Ah, sobre eso— murmuré.

—Sí, sobre eso, ¿qué pasó?

—Tuve un ligero problemita, ¿puedes creerlo?

—¿Cuál ha sido ese ligero «problemita»?

—Pues...— me quedé en completo silencio ya que, he sentido un terrible dolor recorrerme por todo el cuerpo.

Llevé ambas manos hacia mi abdomen e intenté ejercer presión en esa zona pues desde ese lugar ha provenido el inmenso dolor; cerré mis ojos con fuerza e intenté alejar por completo el dolor, pero solo se intensificó.

—Minho, ¿qué sucede? — preguntó Hyunjin, pero no tengo la fuerza para hablar, lo único que pude hacer, fue encogerme de hombros a modo de respuesta.

—¡Mierda! — exclamé —¡Me duele demasiado! — me quejé.

—Te llevaré a la enfermería...

—¡No! — chillé.

Maldita sea, esta vez no estoy fingiendo estar en celo porque todo esto es real y no puedo creerlo.

Intenté levantarme por mi mismo, sin embargo, no pude dar más de un paso y caí al suelo, Hyunjin me levantó con sumo cuidado y sin pensarlo, llevé mi nariz directamente a su cuello en busca de aquel aroma que me hace sentir tan tranquilo, pero no lo encontré y me sentí terriblemente decepcionado.

Lo peor, es que, recordé como había huido Bang y me sentí sumamente triste, sin siquiera percatarme, comencé a llorar pues me siento demasiado deprimido al no tener a mi lado a aquel alfa que me hace sentir completo.

—Tranquilo, no llores— me pidió Hwang mientras me daba ligeros golpecitos en la espalda. Ni siquiera me importó que los y las estudiantes se detuvieran a mirar la escena que está siendo montada por mí.

—Es que... — sollocé —¡No me quiere!

—Claro que sí, él te quiere— me aseguró mientras limpiaba mis lágrimas con sus manos.

—No es cierto, solo quieres consolarme.

Minho no se había percatado de que algunos estudiantes decidieron tomar un par de fotografías y videos en donde se veía a la parejita perdidos en su mundo mientras Hwang le daba cariñitos a Minho en un intento de hacerlo sentir mejor, desde lo lejos, parecían una parejita destinada, pero era todo lo contrario a lo que la mayoría pensó y comenzó a postear en sus redes sociales pues se les consideran la "pareja del año".

Después de unos minutos, Minho se sintió mucho mejor pues Hwang lo había llevado a enfermería y le dieron unos suspensores que le ayudarían a dejar atrás esos tediosos síntomas que solamente ama tener cuando se encuentra con Bang.

El pelirosa se había ido dado que, tenía que asistir a una clase, así que, Minho decidió volver a casa para descansar un poco, sin embargo, se detuvo en seco tan pronto se encontró con Jeongin en las grandes puertas de la universidad, el chiquillo me miró con intensidad y tras cruzarse de brazos, dijo—: Pensaba que éramos amigos, pero veo que me he equivocado por completo. He sido un estúpido, supongo que, en estos momentos, te sientes victorioso, ¿no es así, Minho?

—¿De que estás hablando? — pregunté confuso.

—No finjas, lo sé todo— bufó —¿Crees que podrías ocultar tus verdaderas intenciones? ¡Ja!

—Realmente no sé de qué hablas. Sé más claro— le pedí.

—Eres un maldito hijo de perra— soltó con desprecio —¡No podrás quitarme lo que es mío!

—¡Yo no te he quitado nada!

—Eres un cínico— arrugó la nariz —, pensé que habías cambiado, pero veo que eres el mismo hijo de puta que siempre has sido.

"¿Qué está pasando ahora mismo? ¿Por qué Jeongin se ha vuelto tan agresivo? ¡No he hecho absolutamente nada para ofenderle! ¿O sí?", pensé.

Jeongin se subió a la camioneta y se fue. Durante unos minutos, me quedé inmóvil mientras intentaba procesar las palabras que me han sido dichas por el pelinegro y por más que lo pienso, no hay nada que... ¡Un momento! Acaso, ¿el verdadero Lee Minho era un completo hijo de perra?

De pronto, mi celular emitió un sonido y miré la pantalla. Es momento de empezar a encontrar las verdades que han sido ocultas por la familia del verdadero Minho, de lo contrario, podría ser arrastrado directamente a un pozo sin salida.