Sangre Y Poder 2 (chicaxchica)

Capítulo 17.

Dafne estaba rota y perdiendo poco a poco las esperanzas. Sabía que en cierto punto debía levantarse de la cama, no podía estar ahí siempre. 

Así que ese día se levantaría para hacer las cosas que necesitaba y volvería lo antes posible Abi. 

Sin embargo, cuando intentó ponerse de pie, Abiggail la jaló hacia sí. 

Dafne se emocionó mucho, la abrazó con mucha fuerza y sus ojos no podían contener las lágrimas. Pero al notar la preocupación de Abiggail, ella también se preocupó e inmediatamente empezó a buscar las razones de esa preocupación. 

—¿Qué te paso? —preguntó, dejando que se notara la preocupación qué sentía en ese momento —. Abi, ¿Estás bien? 

Abiggail se acercó lentamente a Dafne, con una expresión que era una mezcla entre de determinación y miedo. Dafne, sorprendida por la seriedad de su mirada, preguntó nuevamente. 

—¿Qué sucede, Abiggail? ¿Por qué tienes ese semblante tan grave? ¿Qué viste? Por favor, me preocupas. 

El gato se acercó y él sí parecía muy feliz al ver a Abi, tanto que se abalanzó sobre ella. El gato estaba demasiado feliz, Abi recordó cuál era su nombre, entonces el gato sabía que Abi ya había llegado a ese punto en el que recordaría quién era realmente. 

—Lo lamento mucho, pequeño —suplicó disculpas Abiggail al pequeño gato. 

—Entonces, ¿volverás? —preguntó el pequeño aferrándose a su legítima dueña. 

—Sí, pequeño, lo solucionaré. 

Dafne, sin entender de que estaban hablando, interrumpió el momento emotivo entre el pequeño gato y su dueña. 

—Un momento, ¿de qué están hablando? 

Abiggail tomó aire antes de responder, sabiendo lo difícil que sería revelar su verdadera misión. 

—Dafne, necesito tu ayuda para regresar a un mundo al que pertenecimos. Pero para lograrlo, debo cumplir un acto muy doloroso.

—¿Hablas del mundo de donde viene el gato? ¿Te irás? 

—No, mi idea es que vengas conmigo y cumplir esa promesa que un pasado no pude cumplir y es lo que te atormenta y no deja que me recuerdes. 

Dafne frunció el ceño, confundida. "¿Qué acto? ¿De qué mundo estás hablando?"

Abiggail titubeó por un momento, antes de finalmente confesar la verdad. 

—Fuiste la mujer con la que me casé en una vida pasada, estás aquí en este mundo porque te quite la vida en ese mundo y en este mundo están muchas de esas personas a las que le quité la vida en ese encones. 

Por alguna razón, esta confesión no parecía alterar a Dafne. Ni siquiera el hecho de que Abi le quitó la vida en algún momento, porque había una razón muy fuerte detrás de todo esto. 

—Si regresas, ¿ellos dejarán de atormentarme? 

Abi ya sabia que era eso que atormentaba a Dafne y entonces debía solucionarlo para que su princesa dejara de sufrir. Porque si no lo hace, Dafne siempre vivirá atormentada por la promesa que ella jamás pudo cumplir. 

—¿Sabes que yo haría lo que sea para ayudarte? Solo dímelo y lo haremos. ¿Quieres que llame a los demás? 

—No, no quiero que nadie se entere. 

—Abi, me asustas, dime que tengo que hacer y ya está. 

—Para regresar a mi mundo, debo acabar con tu vida —dijo Abiggail bajando la mirada.