Capítulo 58.

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—He tenido bajas de todo tipo —expresó María con desesperación—… dinero, autos, laboratorios e incluso han descubierto rutas. Esto pone en juego mis alianzas.

María tenía ese presentimiento de que Lily querría vengarse de alguna forma, pero se le hacía simplemente difícil creer que Lily aún tuviera algún tipo de relación con la DEA.

Cuando la DEA le daba estos golpes bajos lo hacía con mucha precisión, porque habían robado parte de la información. Sin embargo, María piensa que la DEA se dio cuenta de la información sobre su casa por alguien más.

No tenía ni la menor idea de que el plan la llevaría a estar de rodillas delante de la niña a la que le destruyó la vida… bueno, así debería ser, pero alguien tiene pensamientos distintos.

Alguien le dará una pequeña ventaja a María y eso podría ser fatal para Lily.

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En la mañana las marcas rojas en el cuello de la pobre de Mariana eran simplemente horribles, lo quieta que tuvo que quedarse durante tanto tiempo para evitar terminar ahorcada. Imagina estar en esa posición, saber que de un momento a otro terminarás ahorcada en medio del bosque.

A pesar de que ya estaba a salvo, Mariana se veía demasiado triste y parecía no querer responder a las preguntas de nadie. Le preguntaban, pero se negaba a escribir para responder, solo respondería si es Abril quien le pregunta.

—Sé que esta pregunta podría considerarse absurda, pero —dijo Abril acercándose al saber que era la única a persona a la que le prestaba atención—, ¿estás bien?

Mariana negó, era notable que estaba tratando de no llorar, pero el sentimiento de haber perdido al perrito que fue su única compañía y apoyo emocional durante años parecía estar golpeando su corazón para obligarla a hacerlo.

—¿Por qué de repente decidieron hacerte esto? —inquirió Abril— ¿Sabes por qué?

*Parece que Daniela se enojó conmigo*

—Pero, ¿por qué?

Mariana sostuvo el lápiz sobre la hoja de aquel cuaderno, ella conocía a la perfección las razones, pero no le iba a decir eso a Abril, tenía que mentirle.

*Creo que simplemente ellas se cansaron de mí*

—¿Y tu perrito? ¿Qué hicieron con él?

Mariana dejó caer el cuaderno y el lápiz y simplemente quiso buscar un abrazo y con el apoyo emocional de parte de Abril. Por su llanto y ese deseo de buscar alivio, Abril entendió que el perro ya estaba muerto.

—¿Matarlo? ¿Sin razón alguna?

—Yo creo que sí se enojaron por algo —respondió Angelo ante a preguntas de Abril—. No le harían eso solo porque sí.

—Por primera vez, estoy de acuerdo con el idiota —agregó Madeline.

—Yo sé que yo siempre te he gustado —respondió Angelo con orgullo.

El abrazo de Mariana se estaba prolongando demasiado, más de lo que Abril era capaz de soportar.

—Muy bien —dijo intentando separarse sutilmente de Mariana—, ha sido suficiente. Suéltame ya.

Mariana negó y simplemente se aferró mucho más. Abril le daba un sentimiento de seguridad, Abril era la mujer a la que le ha dedicado sus canciones, le agradaba la compañía de Abril… no se alejará de ella.

—Parece que te quiere mucho —dijo Madeline observando el tierno momento.

—No, solo está siendo agradecida y me va a soltar pronto —Abril intentó una vez más alejar a Mariana, pero seguía siendo en vano—. Mariana, ya estás a salvo.

Sangre Y Poder 2 (chicaxchica)Where stories live. Discover now