CAPÍTULO CINCUENTA

52K 4.1K 1.5K
                                    

TAL VEZ ESTOY DEMASIADO OCUPADO SIENDO TUYO, COMO PARA ENAMORARME DE ALGUIEN MÁS




No volvemos a casa, sino que decidimos ir a un bar a beber algo.

No hablamos de Seks, aunque estoy segura de que tanto Pierce como Dean están recreando algunas escenas en su cabeza y no voy a negarlo, yo también estoy haciéndolo.

Je.

Nos pedimos unas cervezas para tomar, mientras que miramos a nuestro alrededor y teniendo en cuenta la hora, la gente está bastante más animada que nosotros, debido a que casi no hemos bebido.

Prometo arreglar eso pronto.

No hablamos de nada en particular, solo comentamos cosas al azar y del viaje al que emprenderemos a la tarde siguiente.

Dean explica que tuvo unos días libres en el trabajo y que se sentía agobiado de la ciudad, que necesitaba respirar aire nuevo aunque sea solo por unos días, cuando dice aquello lo veo dudoso y hay algo atormentado en su mirada que hace que un deje de preocupación se asiente en la boca de mi estómago y por la mirada de soslayo a Pierce, me doy cuenta de que él también de repente luce un poco preocupado, de todas maneras, antes de que pueda decir nada, niega con la cabeza y le dice que no hay problema que nos acompañe en nuestro viaje y cuando los ojos de ambos se clavan en mi, asiento con gusto, porque si tengo que serles completamente sincera, la presencia de Dean nunca podría incomodarme.

Dean mira hacia abajo, con algo parecido a la vergüenza, pero también con un alivio tremendo.

Intercambio una mirada con Pierce y niega con la cabeza, como diciéndome: «Si, también lo vi, pero ahora no es el momento»

Pido un trago de chupitos para disipar el momento y ambos ríen, de seguro por que saben que necesito beber cuando estoy nerviosa, lo más probable es que por lo que queda de este viaje, me mantenga en un estado de ebriedad constante.

Je.

Esa primera ronda de tragos se termina convirtiendo en una segunda por parte de Pierce y la tercera por Dean, que a estas alturas luce una sonrisa medio borracha.

Pierce se mantiene en la barra, pero Dean y yo nos acercamos a la pista y medio comenzamos a bailar, pero en realidad terminamos riendo de la manera en la que bailan los jóvenes a nuestro alrededor.

—Podrían ser mis hijos —le murmuro, cosa que lo hace desternillar de la risa por la exageración.

Decidimos ir a otro antro, en el que esta vez si hay gente más acorde a nuestra edad. Nos pedimos tragos distintos entre nosotros para así compartir. No puedo negar que estar entre estos dos hombres me calienta más que el sol en verano, de todas maneras intento que no se me note, pero cada vez que me giro en dirección a Pierce está mirándome de esa manera que me dice que quiere follar y yo no puedo evitar pensar que también quiero follar, pero esta Dean y no estoy segura de si el también quiere follar.

Nada más ese pensamiento llegar a mi cabeza me abochorno y murmuro que quiero ir al baño, donde me termino remojando la nuca por el calor que me invadió de repente.

Una vez que salgo de los baños intento buscar a los chicos y encuentro a Dean saltando en medio de la pista cuando suena una canción electrónica que se que le encanta, no puedo evitar reirme cuando nuestras miradas se encuentran, sin embargo medio chillo cuando una mano se cierra en mi antebrazo y me arrastra hasta ponerme contra una pared y entonces, Pierce está besándome.

Pecado con sabor a caramelo. LIBRO 2Where stories live. Discover now