C107 - El granjero y la serpiente (1)

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El convoy continuó yendo hacia el norte, pero el vehículo todoterreno no era adecuado para conducir en un día de nieve tan fuerte, después de todo, y pronto se detuvo cuando se descompuso. Sin otras opciones, Zhan Yun y los demás tuvieron que transferir a las siete débiles chicas al crucero de nieve.

Todos dejaron las camas en el dormitorio para que las niñas descansaran, mientras se apiñaban en la sala de almacenamiento para descansar. De todos modos, pronto deberían encontrarse con el ejército de Wancheng que viaja hacia el sur, por lo que solo necesitan transferirles a estas chicas.

Teniendo en cuenta que estas chicas tuvieron hambre durante muchos días y estaban muy débiles, Su Ruizhe cocinó especialmente papilla blanca de fácil digestión, puso un poco de salsa de soja y hilo de cerdo y fue con Cheng Jiao a entregarles la comida.

―Su Ruizhe... ―No esperaba que una de las chicas más jóvenes lo conociera.

―¿Tú eres...? ―Desde el renacimiento de Su Ruizhe, su corazón se ha centrado en Zhan Yun. Siempre ha prestado poca atención a las mujeres, así que no tiene ninguna impresión de esta chica.

―¡Yo, yo soy Xu Jiani! ―La chica mostró una expresión de lástima.

En este momento, Su Ruizhe realmente sintió un poco de familiaridad, pero no pudo recordar al instante.

―Hey, Xiao Zhe, ¿no es esta la compañera de clase que te pidió que la reconocieras en la base? ―Cheng Jiao tenía buena memoria y la reconoció inmediatamente.

Esta chica era la llamada 'compañera de clase' que Su Ruizhe conoció en la Base Sur. Cheng Jiao no tenía una buena impresión de ella. Más tarde, lloró y huyó. ¿Cómo llegó a la Base Lincheng y se volvió así?

Al escuchar lo que dijo Cheng Jiao, Su Ruizhe también recordó, pero la mayor experiencia con esta compañera de clase fue algo de su vida anterior. Fue hace demasiado tiempo, y no prestaba atención a las chicas, por lo que tiene una impresión muy débil de Xu Jiani.

Pero al final, era una compañera de clase, Su Ruizhe también intentó atenderla con unas palabras, sacó dos caramelos de su bolsillo y se los dio, y se fue con Cheng Jiao.

Las otras chicas miraron con envidia los suaves caramelos en la mano de Xu Jiani. No sabían cuánto tiempo llevaban sin probar un caramelo. Sin embargo, sólo sentían un poco de envidia, y pronto apartaron la mirada y siguieron bebiendo sus gachas.

Xu Jiani abrió con cuidado el envoltorio del caramelo y se metió el suave caramelo en la boca. El sabor dulce floreció en su boca. Cerró lentamente los ojos para ocultar el color oscuro de sus ojos.

Durante el día, habían estado en la carretera, y por la noche encontraron un espacio abierto y se detuvieron a descansar. Zheng Jiahe, Cheng Jiao y Su Ruizhe, que eran los responsables de la vigilia esa noche, no sabían conducir, y básicamente eran los que descansaban durante el día, por lo que serían la vigilia de la noche.

Cheng Jiao y Zheng Jiahe van en los asientos delanteros, mientras que Su Ruizhe vigila el pasillo del medio. Al fin y al cabo, hay gente de fuera en el coche. Ser cuidadoso es siempre lo correcto.

Cheng Jiao charlaba con Zheng Jiahe, y aunque Su Ruizhe se sienta solo en el pasillo, no se aburre. Estaba sosteniendo un teléfono móvil prestado por Zheng Jiahe y jugando a ese juego de plantas, buscando más inspiración para luchar con las plantas. Y este juego es realmente interesante, así que se lo pasó muy bien con un power bank.

En medio de la noche, Su Ruizhe oyó unos pasos extremadamente ligeros, e inmediatamente se puso alerta. En cuanto levantó la vista, vio a Xu Jiani apoyada en la pared y caminando lentamente hacia él.

Cerezo - Pequeño amanteWhere stories live. Discover now