Cerezo - Pequeño amante

C048 - Inicio del rescate

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El equipo de Zhan Yun tomaría parte en la operación esta vez, pero como estaba con el ejército, no sería apropiado ir con un Dongdong impotente y un gato mascota.

Debido a que gran parte del equipo de Zhao Bing resultó herido, Jiang Xuzhou les permitió llevar a cabo la misión defensiva en el área de servicio, no en Ciudad A.

Entonces, antes de irse, Zhan Yun buscó a Zhao Bing y le confió el cuidado de Dongdong y el pequeño gato negro durante dos días. También les dejó dos mochilas de comida.

Probablemente sabiendo que sus hermanos mayores se iban, Dongdong hizo un puchero, extendió la mano y agarró la ropa de Su Ruizhe. Sus grandes ojos oscuros parecían querer llorar.

El corazón de Su Ruizhe se suavizó. Extendió la mano y revolvió el cabello de Dongdong. Se puso en cuclillas y dijo suavemente: ―Sé obediente, el hermano mayor volverá pronto, ¿entiendes? 

Dongdong asintió obedientemente y de mala gana lo soltó.

El convoy partió rápidamente. Esta vez, había 20 vehículos militares pesados ​​y 800 soldados totalmente armados en camino a Ciudad A para su rescate. Después de una conversación en la mañana entre Zhan Yun, Su Ruizhe y Jiang Xuzhou, decidieron una tarea adicional de recolectar vegetales, frutas y semillas de plantas.

El equipo de Zhan Yun y Su Ruizhe también tomó uno de los vehículos militares armados con ametralladoras emitidas por el ejército y llevó las municiones en sus cuerpos. Aparte de Zhan Yun, era la primera vez que la mayoría de las personas del equipo sostenían un arma. Fue un sentimiento extraño.

Solo Zheng Jiahe se quejó sin cesar: ―Yo tampoco sé cómo disparar. Es tan pesado que sería mejor darme un palo de hierro...

Zhang Shuoliang no dijo nada, pero por su expresión, estuvo de acuerdo con las palabras de Zheng Jiahe.

Wu Jing, de mal humor, pellizcó al hombre que estaba a su lado y luego lanzó dagas a Zheng Jiahe. ―Todos los demás pueden mantener su disgusto, solo tú no. 

El otaku muerto que no tenía forma de tomar represalias contra una mujer se calló enojado.

Cuando el convoy entró lentamente en la ciudad, el ruido atrajo a numerosos zombies, pero las ruedas los aplastaron sin piedad. Disparos ensordecedores y explosiones continuaron sonando, anunciando la llegada del ejército a los sobrevivientes en la ciudad.

El gobierno había transmitido mensajes de rescate una y otra vez en la radio. La gente de la ciudad debería haber recibido las noticias cuando tenían acceso a una radio.

Sin embargo, cuando el convoy entró en la ciudad, era un desastre con vehículos abandonados en todas partes. El sol se había podrido y secado los cadáveres, dejando solo a los zombies, caminando en su dirección con aullidos bajos.

―¿Qué está pasando? ―La situación era demasiado extraña, los soldados estaban bastante sorprendidos.

Cuando se ingresó a la Ciudad S para buscar y rescatar, las ventanas de innumerables edificios residenciales estaban cubiertas con ropa roja, cortinas, bufandas y ropa interior. Si fuera rojo, estaría colgado. Si realmente no tenían, entonces se podían colgar otras piezas de tela de colores brillantes, y los soldados irían a comprobarlo.

Aquí, sin embargo, toda la ciudad era como un pueblo fantasma, sin vida.

¿A dónde fue la gente? En una ciudad tan grande, ¿realmente no había una persona viva? ¿O no han escuchado la radio?

―¡Los equipos 1 a 10 son responsables de cubrir, otros equipos están en búsqueda y rescate en el área cercana! ¡Todos los equipos, enciendan el detector de vida! ―Las instrucciones vinieron del intercomunicador.