Cerezo - Pequeño amante

C110 - El estado de las dos familias (1)

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Aunque los platos no son tan buenos como los que suele comer el grupo de Zhan Yun, no son exigentes. Hablan mientras comen con el Señor Xie y la Directora Bai.

Después de oír a la Directora Bai mencionar que Cheng Qi y Cheng Jiao son hijos de la familia Cheng, la cara del Señor Xie se volvió más y más amable: ―Jóvenes, ¿quieren ir a casa a verlo? Después de todo, Lao Cheng es viejo. Me temo que sufrirá mucho este invierno. 

Cheng Qi y Cheng Jiao se miraron y asintieron con la cabeza.

Después de la cena, la Directora Bai pidió a algunas personas que les consiguieran alojamiento. Las casas de la Base Capital fueron todas construidas tras el apocalipsis, por usuarios de habilidades de tierra, madera y metal, los mejores y más destacados talentos y un gran número de supervivientes de todas las direcciones. No es difícil derribar algunas de las casas y reconstruirlas.

La casa que la Directora Bai dispuso para ellos era de nueva construcción, pero nadie vivía en ella. El arreglo de todo el edificio dependía de ellos. La Directora Bai quería organizar algunos soldados para proteger su seguridad, pero ellos se negaron amablemente. Si no tuvieran la capacidad, no habrían confiado en tan poca gente para venir a la capital a entregar materiales. Así que la Directora Bai se dio por vencida y dejó a Yang Fan allí, para que encontraran a alguien cuando lo necesitaran.

―Ah Zhan, ¿quieres volver y echar un vistazo? ―Después de que todos regresen a la habitación para descansar, Cheng Qi y Cheng Jiao vienen a buscar a Zhan Yun y a Su Ruizhe.

Zhan Yun está tranquilo y no responde, pero Su Ruizhe ve su vacilación. Sabe que desde que Zhan Yun y los hermanos Cheng eran pequeños, deben haber crecido en la capital, es decir, sus familias están todas aquí. Recuerda que Zhan Yun mencionó que él y su familia se habían distanciado completamente, por lo que no quería volver. Pero en la vida anterior, después de que Zhan Yun se separara de él, volvió a la capital.

―Es raro volver. Sólo echa un vistazo. ―Su Ruizhe susurró un consejo. Sentía que si no fuera por él en esta vida, Zhan Yun vendría a la Base Capital. No quería que Zhan Yun se arrepintiera en el futuro, así que le aconsejó que echara un vistazo.

Bajo la persuasión de los hermanos Cheng y de Su Ruizhe, Zhan Yun aceptó a regañadientes.

Los cuatro fueron a buscar a Yang Fan, le comunicaron los nombres de sus mayores y le dijeron que querían visitarlos. Por supuesto, Yang Fan no dudó. Inmediatamente fue a buscar a alguien y pronto volvió con una nota con la dirección.

Los cuatro rechazaron la petición de Yang Fan de acompañarlos y salieron juntos.

Fuera está nevando y el viento es cortante. Afortunadamente, llevan gruesos sombreros de fieltro y gruesas botas de nieve. No les resulta muy difícil caminar.

Primero fueron a ver a la familia Cheng. Las tres generaciones de la familia Cheng son soldados. El Padre Cheng alcanzó el puesto de general de división gracias a sus hazañas militares. Luchó toda su vida y no consiguió un par de preciosos gemelos hasta los 46 años. Por supuesto, fue muy estricto con ellos. No sólo les enseñó las reglas militares desde la infancia, sino que los envió al ejército en cuanto se graduaron de la escuela secundaria.

Pero al vivir bajo tanta presión durante todo el año, Cheng Qi y Cheng Jiao inevitablemente darán a luz cierta rebeldía. Por lo tanto, sus personalidades son muy diferentes. Son los mismos en el ejército y los mismos en privado. Están muy enojados con Cheng Fu, quien tiene grandes esperanzas en ellos. El Padre Cheng es recto y estricto, pero la Madre Cheng ama a sus hijos. Cheng Qi y Cheng Jiao desarrollan su personalidad actual, que está naturalmente relacionada con la indulgencia de la Madre Cheng.