Cerezo - Pequeño amante

C040 - Plan de rescate

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Cuando Song Chengshu vio a Zhao Bing desmayarse, fue inmediatamente a comprobar y descubrió que la temperatura de su cuerpo era asombrosamente alta. Estaba sufriendo de fiebre.

―¿Qué pasa? ¿Hay algún otro lugar donde el Teniente Zhao resultó herido? ―La herida en el brazo de Zhao Bing ya estaba vendada y no podían ver manchas de sangre en ningún otro lado. No debería haber más heridas.

Varios de los soldados se miraron. No podían recordar si el teniente tenía otras heridas.

Song Chengshu no pudo encontrar una razón para su colapso, por lo que simplemente le quitó la ropa a Zhao Bing. Notó un rasguño superficial en la parte posterior de su cuello, tal vez causado por las uñas del zombie. Debido a que la herida era poco profunda, no había mucha sangre, por lo que no llamó la atención.

Empujó los párpados de Zhao Bing para ver que sus pupilas seguían siendo normales. Aunque sus ojos eran un poco hiperémicos, solo deberían ser causados ​​por el agotamiento y las noches regulares. No era tan exagerado como los ojos completamente rojos de aquellos que habían sido infectados. Mientras pudiera resistir el ataque del virus, debería poder sobrevivir.

―Doctor, ¿qué le pasó a nuestro teniente? ―Varios de los pequeños soldados estaban asustados, temiendo que Zhao Bing sufriera el mismo destino que su compañero de armas en este momento.

―No importa ahora. Debería estar luchando contra el virus. No podemos hacer nada, solo puede confiar en sí mismo.

Un pequeño soldado cayó al suelo y miró a Zhao Bing, cuya cara tenía una expresión de dolor y sus dientes estaban apretados. No pudo evitar derramar una lágrima.

―Maldíceme. Si el teniente no me hubiera arrastrado, ahora estaría tirado allí...

―No sirve de nada decir eso ahora. Deberías ir a buscar bolsas de hielo, al menos ayudarlo a enfriarse. 

Después de escuchar las palabras de Song Chengshu, los soldados fueron inmediatamente a la farmacia a buscarlas, dejando solo tres personas para atender a los heridos.

Song Chengshu miró a Zhao Bing y suspiró profundamente. Ahora, lo que más necesitaba Zhao Bing era una taza de jugo de vegetales, pero el jugo de vegetales también era lo más improbable que apareciera aquí.

Cuando entraron por la puerta principal, habían sido demasiado apresurados y dejaron los autos afuera. Incluso si quisieran fingir que lo obtuvieron del auto, no pudieron.

Sin embargo, el repentino sonido de cristales rotos atrajo la atención de la gente.

―Cuídalos aquí. ―Zhan Yun habló con decisión a los tres jóvenes soldados. ―¡Saldremos y echaremos un vistazo! 

―Entonces... Bueno, si hay algún peligro, ¡llámenos de inmediato! ―Los tres jóvenes soldados pensaron que ellos eran los soldados y que ellos deberían ser los que enfrentaban el peligro. Pero todavía había varios camaradas inconscientes acostados aquí, por lo que no podían alejarse. Solo podían dejar que el otro grupo saliera a verificar la situación.

―Bueno. 

Tan pronto como llegaron al corredor, vieron a varios zombies romper una ventana de vidrio y tratar de subir. Las ventanas del hospital estaban hechas de vidrio endurecido; no fue fácil romperlos. Parecía que la fuerza de estos zombies realmente había aumentado.

―¡Permítame! ¡Déjame! ―Zheng Jiahe gritó y se apresuró. Los palos de golf en sus manos golpeaban y golpeaban las cabezas de los zombies, que estallaron.