Transmigró para convertirse en la concubina masculina del tirano

Capítulo 14: Secreto

Le dijeron que se prepare, pero de hecho, Wen Chi no tiene nada que preparar.

El dueño original era un hombre pobre.

Al día siguiente, temprano en la mañana, Wen Chi se despertó.

Ruotao empacó algunas cosas simples para él, incluidos algunos pasteles empacados en cajas de comida: estos pasteles fueron hechos por Ruotao y Ruofang anoche. Era un pequeño cuadrado cubierto con crema espesa, aunque la crema aún no está bien proporcionada, tenía una belleza irregular con la decoración de unos mangos cortados en pequeños trozos.

Ruotao y Ruofang eran muy reacios a Wen Chi, por lo que simplemente lo despidieron.

A Ping An no le gusta charlar como a las dos niñas, se inclinó levemente y caminó por la parte de atrás sin decir una palabra.

 En el pasado, Wen Chi no lo sabía, y nunca sintió que hubiera algo entre Ping An y Ruotao. , así que debía callarse, si ve a Routao alrededor de Wen Chi, él debe alejarse con calma.

Por otro lado, Ruotao, la niña que todavía estaba charlando, no notó nada malo, sus grandes ojos brillantes eran como estrellas en el cielo nocturno, mirando directamente a Wen Chi con un gran entusiasmo y alegría descarados.

Wen Chi tenía que admitir que Ruotao es realmente una niña adorable.

Tal vez porque Ping An es una persona que parece tener un corazón pesado, así que incluso si hace esto, Ruotao y Ruofang no creen que haya ningún problema, y ​​tienen cuidado de mantener la distancia de Ping An.

En el camino, Wen Chi miraba a Ruotao.

Desafortunadamente, todavía no encontraba nada inusual en Ruotao.

Hasta el momento en el que se separaron, Wen Chi se rindió y rápidamente dejó atrás ese problema.

Fuera del palacio, Xiao Shuan, junto al eunuco Zhu, esperaban en silencio junto a un carruaje.

El vagón era diferente de los vagones ordinarios. Parecía más atmosférico y lujoso. La cortina dorada cubría el techo, y las delicadas líneas doradas profundas brillaban al sol, lo que era realmente deslumbrante, el caballo frente al carruaje era un caballo negro puro, incluso Wen Chi, que no sabía nada de caballos podía saber con un vistazo que ese era un caballo muy valioso.

"Joven maestro Wen", Xiao Shuanzi inclinó la cabeza y dijo: "Este sirviente está esperando aquí por orden de Su Alteza Real".

Wen Chi se sorprendió por un momento: "¿Su Alteza Real?"

"Exactamente", dijo Xiao Shuanzi, "Joven maestro Wen, suba al carruaje rápidamente, para no perder más tiempo".

Wen Chi ahora entendía el porque Xiao Shuanzi estaba ahí, pero todavía no entendía por qué el príncipe había preparado especialmente un carruaje para enviarlo de regreso, esto realmente no era el estilo del príncipe, él era más como una comadreja saludando a la gallina, inquieta pero amable.

Así que no esperaba que el príncipe le preparara un carruaje, Wen Chi tuvo que morder la bala y sentarse en él.

Después de agradecer a Xiao Shuanzi, sacó una pieza de plata de su manga como solían hacer Ruotao y Ruofang, y se la entregó a Xiao Shuanzi en secreto.

Si era tan cariñoso, Xiao Shuanzi no podría favorecer a las muchas otras concubinas en el Palacio Este, además de que era el único que estaba en los ojos de Su Alteza Real.

Wen Chi dijo: "Eunuco Shuan, tengo algo que preguntarte".

El pequeño Shuan de manos cortas dijo apresuradamente: "Joven maestro Wen, por favor hable".