Transmigró para convertirse en la concubina masculina del tirano

Capítulo 119: Vivir juntos

Wen Chi estuvo avergonzado por un momento, luego asintió descaradamente: "Sí".

Shi Ye pareció ver lo que Wen Chi estaba pensando, luego arrojó la carta sobre el escritorio, rodeó ligeramente la cintura de Wen Chi con sus brazos y dijo con indiferencia: "Si no quieres ir, entonces no vayas".

Wen Chi, naturalmente, no se quería ir, pero consideró que la persona que envió la carta era la concubina Rong, y la concubina Rong era la mujer más favorecida en el harén antes, si ignoraba a la concubina Rong, ¿No se lo pondrá difícil a Shi Ye?

Wen Chi pensó por un momento, frunció el ceño y preguntó en voz baja: "¿Es eso posible?"

Shi Ye dijo: "Ahora el poder en este palacio se ha dividido durante mucho tiempo, y esa mujer no tiene una cara tan grande como para que todos le hagan caso, quien no sabe que el tan llamado banquete familiar no es más que un banquete familiar. Es solo un pretexto, me temo que habrá muchas personas que no irán allí, no te preocupes ".

Después de decir eso, Shi Ye de repente tomó la mano de Wen Chi y entrelazó los dedos del dorso de su mano.

La calidez de cada uno se funde a través de la piel.

Wen Chi sintió las yemas de los dedos ligeramente frías de Shi Ye, se volvió para mirar a Shi Ye, tiró de la comisura de su boca y sonrió: "Está bien, te escucharé."

Shi Ye lo miró, sus ojos oscuros parecían tener un estanque sin fondo de agua de manantial, y la sonrisa en sus ojos casi se desbordó.

Después, bajó la cabeza y tocó ligeramente los labios de Wen Chi: "Bien".

El rostro de Wen Chi se puso rojo con una explosión, como si estuviera a punto de arder en el momento siguiente.

Del otro lado del escritorio, el eunuco Zhu estaba acostumbrado a estas imágenes desde hace mucho tiempo, y todavía sostenía el batidor con mucha calma, sin siquiera molestarse en levantar los párpados.

Fue difícil para Liu De, Liu Shan y otros que estaban de pie junto al eunuco Zhu. Habían seguido a Su Alteza Real durante muchos años. ¿Cuándo vieron alguna vez la imagen de Su Alteza sosteniendo a alguien así? Incluso dudaron si la persona frente a ellos era Su Alteza Real...

¿Esto es lo que podría hacer el ex príncipe heredero?

Un grupo de hombres corpulentos no se quedaron quietos ni caminaron, se miraron unos a otros y vieron sorpresa e impotencia en los ojos de los demás.

Al final, inclinaron la cabeza tácitamente, sin siquiera atreverse a mirar en dirección a Su Alteza Real, solo querían convertirse en polvo en el aire.

Incluso si Wen Chi no levantó la vista, podía sentir la impotencia de los demás y luego se dio cuenta de que Shi Ye todavía lo sostenía como un cachorro en brazos.

Durante un tiempo, la vergüenza que finalmente se disipó volvió a su corazón nuevamente, Wen Chi estaba sentado sobre los brazos de Shi Ye, y rápidamente extendió la mano para recoger la carta que fue arrojada en el escritorio de Shi Ye, intentó ponerse de pie.

¿Cómo podía saber que tan pronto como intentó levantarse, sintió una resistencia de la mano de Shi Ye alrededor de su cintura, no tuvo tiempo de reaccionar, Shi Ye lo presionó.

El cuerpo de Wen Chi estaba rígido y no se atrevía a respirar. Le tomó mucho tiempo encontrar su voz: "Ya que estás ocupado, volveré más tarde".

"No estoy ocupado". Shi Ye apoyó la barbilla en el hombro de Wen Chi como antes, su pecho se presionó contra la espalda de Wen Chi, y el calor de su aliento era como un velo persistente en las orejas de Wen Chi, " No te vayas, solo quédate conmigo aquí".