Transmigró para convertirse en la concubina masculina del tirano

Capítulo 101: A Gu

Después del almuerzo, Wen Chi fue a ver qué dijo Ruotao sobre una piscina y se sorprendió al descubrir que había una grande y pequeña en la parte trasera de cada casa.

Era la primera vez que Wen Chi veía una piscina al aire libre en una casa, era muy novedoso, así que planeo volver por la noche para verlo.

A medida que avanza el día, el cielo se va cubriendo gradualmente de una noche azul oscuro.

Cuando llegó a la psicina, la gente de la villa había llenado la piscina con agua caliente, una niebla blanca permanecía en la superficie del agua y una hilera de pequeñas linternas colgaba cerca iluminó esta elegante vista.

Se sentía frío

Wen Chi se apoyó contra el borde del estanque y dejó escapar un suspiro de alivio.

Se cayó en la piscina y se derritió en el agua caliente.

Wen Chi observó en silencio, luego cerró lentamente los ojos.

Se sumergió en la piscina durante aproximadamente media hora. Por alguna razón, el agua de la piscina todavía no tenía la intención de enfriarse, pero Wen Chi sintió sueño.

No quería empaparse más, así que decidió levantarse.

Tan pronto como abrió los ojos, de repente se encontró con una pequeña cara blanca como la nieve. Los dos pequeños ojos negros eran como botones negros.

Wen Chi: "..."

Esto es... ¿un perro?

¡Hay perros en la villa!

Pero no parece un perro.

Al momento siguiente, la carita se acercó y la pequeña nariz negra se movió ligeramente, olfateando alrededor de la cara de Wen Chi.

Wen Chi todavía estaba sentado en el borde de la piscina, con los brazos detrás de los adoquines en el borde, levantó la cabeza y simplemente colocó la cabeza suavemente sobre el adoquín.

El toque húmedo de la saliva en sus mejillas hizo temblar a Wen Chi, inmediatamente se liberó del estado de aturdimiento y levantó la cabeza por reflejo, golpeando la cabeza del animal.

El animal parecía haber sido golpeado y lastimado, hizo un ladrido similar a un perro, y al mismo tiempo saltó hacia atrás más de medio metro como un resorte, de repente saltó fuera de la vista de Wen Chi. .

Al ver esto, Wen Chi se levantó rápidamente. Estaba a punto de recoger la ropa colgada en el estante de madera a su lado, cuando escuchó pasos frente a él.

Se sobresaltó, pensando que no llevaba nada de ropa, y se apresuró a agacharse en la piscina.

Pero los pasos se detuvieron detrás de él, y luego la voz de Ruotao sonó deliberadamente: "Maestro, ¿acaba de ver un zorro blanco?"

¿Zorro blanco?

Wen Chi entonces recordó mirar al animal que acababa de lamerlo.

El pequeño ya se había calmado, en cuclillas no muy lejos de la piscina, el pelo blanco y las baldosas oscuras formaban un fuerte contraste, vio a Wen Chi mirando por encima, inclinó la cabeza, como si mirara en Wen Chi curiosamente.

Aunque Wen Chi nunca antes había visto un zorro en persona, ha visto muchas fotos de zorros en Internet, y ahora que mira con atención, todavía puede reconocer que el pequeño no es un perro sino un zorro.

Es solo que los zorros blancos son raros. Wen Chi ha visto tantas fotos de zorros, pero no parece haber visto zorros blancos.

No esperaba que hubiera un zorro blanco en esta villa. Parecía que había una persona especial para servirlo. Tal vez era la mascota de la Concubina Rong en esta villa.