D.M.P.S.Q.S.V.P.D.D.R

Capítulo 123: ¿Quieres ser mi ahijado?

"Yan Yan, tu padre y yo volveremos en un par de días a recogerte de nuevo". Song Shuman abrazó con mucho entusiasmo a su hijo pequeño.

Luego abrazó a su buena hermana Yu Qingtong y se jactó en voz baja: "Estoy muy orgullosa de ti. "¿Qué te parece? Me envidias por tener un hijo tan bueno, ¿Verdad?"

Yu Qingtong sonrió y dijo: "¿Quiénes somos? Tu hijo es mi hijo, ¿Por qué eres tan insensible?"

An Qingyan desconocía por completo lo que su madre y su tía habían susurrado, vio a Song Shuman entrar en el coche y se despidió de su madre con la mano: "Adiós mamá, acuérdate de mandarme un mensaje cuando llegues a casa".

"Bien, buen hijo, recuerda hacer tus maletas en los próximos dos días". Song Shuman todavía preguntó ansiosamente antes de irse.

"Mm, lo sé".

An Qingyan ya había prometido volver a casa en un par de días.

Su brazo ya se había curado y no parecía haber ninguna razón para permanecer en la familia Gu por más tiempo.

Los dos se quedaron en la puerta viendo cómo el coche se alejaba poco a poco antes de darse la vuelta, Yu Qingtong suspiró bastante emocionada y agarró la mano del adolescente y le dijo: "Yan Yan, la tía realmente no puede soportar que te vayas a casa".

Realmente envidiaba a Shuman por tener un hijo tan bien educado y obediente.

A diferencia de su hijo Gu Fei, el cual estaba bien cuando era joven, blanco y tierno como una muñeca, llorando y riendo, pero cuando creció, ya no se acercó a nadie, y su aspecto poco sonriente era como un viejo cachorro viviendo dentro de su cuerpo.

"Tía, en realidad no puedo dejar que ...... el hermano Fei se vayan." An Qingyan se tocó la punta de la nariz con cierta timidez y habló de buena manera: "Volveré a verte a menudo en el futuro".

Yu Qingtong se detuvo de repente y sugirió alegremente: "¿Qué tal esto?, ¿Qué tal si la tía te acepta como su ahijado?"

Miró expectante al adolescente que tenía delante: "Ya ves que tú y Gu Fei están muy unidos, si me aceptas como madrina, Gu Fei será también tu hermano, así que es bueno tener un hermano más que te quiera, ¿No?".

Las comisuras de la boca de An Qingyan se movieron, "......"

¡Esto! ¡Es cierto! ¡No! ¡No! ¡No! ¡Sí!

No quería ser el hermanito de Gu Fei, ¡Era demasiado extraño!

An Qingyan se frotó el cuello sin saber qué decir, levantó las comisuras de los labios y sonrió, mirando hacia otro lado con un corazón culpable, con la vergüenza y la incomodidad escritas en todo su cuerpo.

Esto era algo a lo que no podía acceder, y aunque lo hiciera, Gu Fei no lo aceptaría.

La reacción del adolescente fue tan obvia que Yu Qingtong vio naturalmente su dificultad, e inmediatamente se puso un poco triste, y su tono de voz estaba un poco perdido: "¿Qué pasa? Yan Yan, ¿No quieres?"

"¡No, no lo es!" An Qingyan asintió y sacudió la cabeza, interiormente desgarrado, finalmente apretó los dientes, se decidió y habló mansamente: "Tía, en realidad ...... en realidad tengo algo que he estado queriendo decirte".

"¿Qué?"

"Tú ...... entremos primero y hablemos de ello,"

Unos minutos más tarde, los dos se sentaron en diagonal, uno frente al otro, en el sofá del salón, y Yu Qingtong, observando el aspecto evidentemente nervioso del adolescente, le sirvió, muy pensativo, un vaso de agua.