HMDEAE

Capítulo 32 Guerra de reclutamiento (5)

Jaiden no respondió a la pregunta de Caeden, pero esto no significaba que Caeden no notaría su afirmación.

—Ja... Sueñas en grande.

—¿Es eso así?

Caeden se rió entre dientes ante las palabras de Jaiden.

—Entonces... ¿Cuándo crees que sucederá esto?

—Creo que todavía nos queda algo de tiempo antes de la ola de monstruos, pero, creo que tenemos un poco menos de siete años antes de que una grieta dimensional completa descienda sobre nosotros.

—Eres mucho más preciso de lo que pensé inicialmente, ¿eh?

Jaiden solo pudo sonreír amargamente a Caeden.

—¿Por qué escondes tantas cosas? ¡Tch! Lo entiendo.

Caeden apretó los dientes con tanta fuerza que se le rompió la punta del cigarrillo, y solo miró a Jaiden con frustración. No pudo evitar chasquear la lengua cuando vio que tenía más cosas que ocultar que ser el hijo mayor del Duque.

—Entonces, ¿hay alguna solución? Tal como dijiste, lo que tenemos no es suficiente para hacer frente a una catástrofe.

—Así es, si seguimos siendo así y solo preparamos lo que tenemos, entonces será difícil para nosotros durar incluso tres años.

—¿Qué quieres decir con tres años? Solo aguantar un año será difícil.

Innumerables registros históricos han demostrado lo duro que fue enfrentar tal catástrofe.

Fue una guerra en la que todos los países del continente trabajaron juntos para apenas mantener el frente y evitar un gran desastre. Fue una guerra que solo terminó después de que innumerables humanos murieran. Además, la grieta dimensional se mantuvo durante cientos de años y resultó en el nacimiento de innumerables monstruos.

Así fue como se describió la ola de monstruos en los registros.

—Si ocurre una ola monstruosa, entonces el noreste definitivamente no sobrevivirá, y tan pronto como suceda, debemos retirarnos.

—Pero no hay forma de que el centro lo permita.

—...Correcto.

Caeden respondió con amargura.

Esos malditos bastardos de la Familia Imperial definitivamente los dejarían atrás. Priorizarían ganar tiempo mientras les permitían sacrificarse "por el Imperio".

Esto era algo que él y el joven alférez sabían.