Capítulo 84

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Después de reunirse con Luo Yu Sen nuevamente y obtener su información de contacto, Qi Mu no lo contactó ni una sola vez.

En parte porque Akkad le dio a Qi Mu una tarea: visitar algunos maestros famosos. Y en parte porque Qi Mu sabía que si él era demasiado entusiasta, Luo Yu Sen sabría que algo estaba mal. Él no era tan estúpido.

Cuando salió de la casa de un famoso violinista con su estuche para violín, Qi Mu miró el sendero y caminó hacia su hotel.

Al mediodía, la luz del sol iluminó la tierra, pintando el carril de ladrillos rojos con una capa de oro. Qi Mu recordó la llamada telefónica que recibió el otro día. Sus cejas se arrugaron cuando se perdió en sus pensamientos.

Secretamente contrató a un detective privado el primer día de su llegada para ver si podía encontrar a la persona detrás de Luo Yu Sen.

Desde su punto de vista, ya que la otra persona podía hacer que Luo Yu Sen corriera el riesgo de drogarlo, tenían que tener un estatus alto. Y deben haber prometido algún tipo de beneficio.

Mientras se intercambiaba dinero, dejaba un rastro de papel. Ser atrapado era solo cuestión de tiempo.

Sin embargo, cuando Qi Mu pensó que podía atrapar fácilmente a la persona detrás de la escena, el detective privado que contrató regresó en apuros, "la cuenta bancaria de Luo Yu Sen no recibió una gran cantidad de dinero en los últimos 10 meses. ¿Le gustaría busca otra información, señor?

Se sorprendió Qi Mu. Pensó por un momento antes de responder: "Busca otras cosas".

Después de recibir otra suma de dinero, el detective privado comenzó a buscar otras cosas relacionadas con Luo Yu Sen en los últimos 10 meses. Qi Mu colgó el teléfono, desconcertado.

Si no era un trato con el dinero, entonces. . . ¿Qué había en ello para Luo Yu Sen?

Qi Mu supo que en los meses posteriores a su muerte, Luo Yu Sen no fue ascendido a diputado del segundo grupo de violín. El asiento quedó vacío. Y por lo que vio esa noche fuera del edificio de la sala de conciertos, los otros miembros habían alienado a Luo Yu Sen.

Si Jacques era a quien Luo Yu Sen estaba ayudando, entonces. . .

¿Por qué estaba tan miserable ahora?

Qi Mu primero pensó que la verdad ya había emergido en la superficie, esperando que él la sacara. Solo ahora comprendía que todo el asunto estaba envuelto en capas de gruesas telas de seda, como si no estuviera claro el reflejo de la luna en el agua.

Y ahora, después de tres días, Qi Mu planeaba contactar a Luo Yu Sen de nuevo para ver si podía encontrar alguna anomalía.

Antes de que pudiera, su teléfono móvil vibraba. Qi Mu vio el nombre familiar en la pantalla y se sorprendió. Presionó el botón de respuesta y susurró: "¿Min Chen?"

Un bajo "Um" vino del otro extremo de la línea. Min Chen continuó en el mismo tono bajo: "Hace mucho que no nos vemos, Qi Mu".

Qi Mu todavía estaba sorprendido pero se rió entre dientes. "Bueno, ha pasado un tiempo desde la última vez que te vi. ¿Está Bai Ai ocupada con los ensayos hoy en día? Si tienes algo de tiempo, vamos a cenar juntos o algo. Últimamente he estado un poco inactivo".

Min Chen llegó a Viena tan pronto como hace diez días. Le había enviado un mensaje de texto a Qi Mu informándole de su llegada.

En ese momento, Akkad todavía estaba pegado al lado de Qi Mu, y no pudo escapar. Cuando Akkad finalmente se fue de Viena, Bai Ai se estaba ocupando de sus ensayos, dejando a Min Chen sin tiempo de sobra.

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