Parte 4

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Les traigo buenas y malas noticias la buena es que hicimos un trato con jennvondy y parte de ese trato es yo les subo este hoy y ella mañana sube dos capítulos de su web si ella lo cumple el martes hay Maratón si no lo cumple no hay capítulo
Eso es todo fin del comunicado

Al rato Roberta ya había salido de la ducha y se había vestido con un pequeño y sexy "shorcito", de los que usaba para sentirse comoda en el dormitorio; también llevaba puesto una bonita camiseta de dormir de color verde. Andaba descalza. De pronto oyo unos suaves golpes en la puerta.

-Roberta, ¿estas bien?...puedes abrir un momento.

-¡Ya voy Diego! (dijo Roberta mientras se secaba rápidamente con la palma de la mano las últimas lágrimas que había vertido y después abría la puerta)

-Disculpame, pero quería ver como estabas.

-Tranquilo, no me he suicidado todavía.

-Eso veo, ¿puedo pasar?

-Claro, es tú casa ¿no? (dijo Roberta mientras le daba la espalda para caminar hasta cerca de la cama donde se dio la vuelta para verlo a la cara).

-Gracias (dijo Diego mientras caminaba adentro y se plantaba frente a ella) ¿Seguiste llorando? (agregó con preocupación cuando vio los ojos enrojecidos de la muchacha y su rostro demacrado).

-No...(contestó Roberta pujando para no llorar delante de él).

-¡Como que no! Con esa carita que tienes. Ahora mismo estás llorando.

-Claro que no, ¡No friegues Diego! (replicó Roberta secandose la cara con el dorso de la mano).

-Roberta, mí amor, por favor, no te sigas atormentando de esa manera (dijo el chico mientras con sus dos manos acariciaba con ternura las mejillas de la muchacha y a la vez alzaba la cara de ella para ver sus lindos ojos) Dime que tengo que hacer para que dejes de llorar; laneta no puedo verte así, me desespera no poder hacer nada.

-Diego no puedes hacer nada; ¿¡No lo entiendes?! ¡Esta porquería de vida no tiene remedio...!

(contestó rompiendo a llorar ).

-Roberta oyeme por favor... No te pido que hables, lo único que quiero es que me escuches. Sientate aquí.

Diego hizo que Roberta se sentara en el borde de la cama y él se sento a su lado, tomando la mano derecha de ella entre las suyas.

-Roberta, tú sabes que yo no soy muy bueno diciendo lo que siento; y también sabes que no soy precisamente el mejor ejemplo de como hacer frente a los problemas...Tú sabes que muchas veces he intentado huír de los problemas para no darles la cara, y que al igual que tú hiciste esta noche he tratado de fugarme...Tú misma una vez me dijiste que fugarme era un error, ¿te acuerdas?

-Sí (dijo la muchacha mientras recordaba como él la beso aquella noche para evitar que lo vieran desde un coche patrulla de la policía).

-Roberta, yo...yo muchas veces he sido un cobarde por no afrontar las cosas como son...pero sí he aprendido algo es que nunca voy a llegar a ninguna parte escondiendome de las cosas que me hieren...lo que trato de decir Roberta...es que sé quelo que te esta pasando es muy grueso, pero no puedes dejar que esto te destruya...¡Roberta, no puedes mandar tú vida por un tubo! ¡No puedes desgraciarte la vida como pensabas hacer esta noche! ¡No puedes hacerlo mi amor!

-¡Diego, Tú no lo entiendes! ¡Tú no sabes lo que es despertarte un día y descubrir que el hombre que tú creías que era tú padre no lo es! ¡Y que tú madre te engaño y que tú verdadero padre es un hombre que se acerco a tí haciendose pasar por otra persona! ¡Mi vida es mentira Diego, es mentira! ¡Todos me engañan, dicen que me quieren pero es mentira! ¡Yo no puedo tener el amor de nadie, porque yo no valgo nada! ¡Soy una estúpida que solo le inspira lástima y desprecio a la gente!

Entre Heroes y HadasWhere stories live. Discover now