Entre Heroes y Hadas

Parte 202

Desde el balcón de su habitación observaba el cielo que pronosticaba un día cálido y primaveral. Una suave caricia en su espalda, lo hizo estremecerse de pies a cabeza. Al voltear, se encontró con el ser que más amaba en la vida.

Mía lo miró tiernamente, regalándole una débil sonrisa. Miguel sintió las lágrimas en sus ojos, y notó la mirada de su amada inundada por el llanto. Acarició su mejilla dulcemente. Mía volvió a sonreirle, aferrándose a él.

Mía: - Todo va a estar bien amor.

Miguel la abrazó fuertemente, como si temiera perderla de un momento a otro. Esa mujer era todo lo que necesitaba para ser feliz. Mía se había convertido en el motor de su vida.

Seis meses después...

El destino había decido ponerse a su favor.

Alma había dado a luz a un niño al cual habían bautizado con el nombre de Tiziano.

Franco era inmensamente feliz por la llegada de su nuevo hijo, la boda de Mía, y la tranquilizadora noticia que había recibido hacía 3 meses atrás: aquel miserable que había dañado a su hija, había sido asesinado en un tiroteo. Ahora podría descansar en paz, sabiendo que su princesa no corría peligro con aquel hombre merodeando.

Mía y Miguel se habían casado hacía 3 semanas, y se encontraban de luna de miel.

Teo le había propuesto matrimonio a Jose, quien había aceptado de inmediato, sin dudarlo.

Vico y su novio habían viajado a París, y tenían planes de radicarse allí.

En una mansión, a unas pocas cuadras de la familia Colucci...

Recargado en la puerta de su habitación, observaba a esa hermosa mujer que yacía dormida en su cama.

La observaba maravillado. Una enorme sonrisa se dibujó en su rostro al recordar la noche de pasión que habían vivido. Ahora, su amada yacía desnuda entre las sábanas, con su hermosa espalda descubierta, y su pelo alborotado. Se acercó a ella, y acarició su rostro tiernamente.

Ante el contacto de aquellas manos que tanto amaba, abrió sus ojos lentamente para encontrarse con la mirada del hombre que le había arrebatado el corazón.