Entre Heroes y Hadas

Parte 190

Amanecer junto al ser amado siempre es un momento sublime, más no alcanza a expresar la satisfacción y el terremoto de emociones que recorren el cuerpo de una mujer cuando despierta de su noche de bodas, en lugar hermoso, tras haber pasado una de las mejores noches de su vida.

Roberta abrió los ojos y se perdió en las facciones de Diego.."Es tan.. perfecto" pensó. Recorría con la mirada desde el último surco de su frente, bajando por la nariz y terminando en su boca..en esa perfecta boca que la tenía loca.

Pronto a las miradas les siguió uno de los dedos de Roberta, que dibujaba con cuidado su perfil. No quería despertarlo, más no podía evitar el contacto, se conocía muy bien el rostro de Diego, pero tenía miedo de...¿de qué? Ni ella misma lo sabía, pero tenía la necesidad de sentirlo, aunque fuera por un mínimo roce.

Diego despertó al instante, pero mantuvo los ojos cerrados, el contacto de la mano de Roberta sobre su cara le gustaba, no podía negarlo. Lentamente abrió los ojos y su mirada se cruzó con la de ella.

-Buenos días mi amor...¿Cómo amaneció la recién casada más linda del mundo? (dijo Diego con una voz un poco adormilada)

-Aún creo estar soñando..(dijo ella volviéndose a recostar sobre el pecho desnudo de él)

-Pues no es un sueño, y créeme que si lo fuera sería el mejor de todos, pero es verdad. Eres mi esposa.

-Y tú mi marido...(ambos se besaron) Suena bien...digo..está chído, desde que te conocí soñé con este momento.

-¿Ah sí? ¿Y cómo te imaginabas que fuera? ¿Era esto lo que te esperabas?

-Ummm La neta, no.

-¿No? (preguntó Diego algo triste y confundido)

-Te voy a ser sincera Diego, yo... aunque pensé mil veces en este momento...y recuerda que esto no lo voy a volver a reconocer en la vida, imaginé que me raptabas o que me llevabas a algún lugar especial y allí, en una finca o en un lugar más privado nos casaríamos.

-¿Entonces no te gustó?

-¡Menso! ¡OBVIO que no me gustó!...(hizo una pausa breve, ya que veía que Diego se empezaba a incomodar) Me encantó, me hiciste sentir como la princesa del cuento de hadas que Mía esconde bajo su colchón...

-¡Me asustaste caray! (dijo Diego, aunque Roberta se limitó a sonreír y a darle un pequeño beso en los labios) ... ¿Es neta que Mía guarda un cuento de hadas bajo la cama?

-¡Diego! Este no es un tema del que tú tuvieras que saber........sólo esto JAJA No sólo guarda un cuanto de hadas, sino que tiene una colección enterita de cromos y polvos y cosas de esas raras que venían con no se qué revista escondidas en el 2º cajón del tocador...

-JAJAJ (rieron los dos) Te Amo...

Unas horas antes, en otra parte del hotel, la situación era bastante diferente. Dado el estado en el que quedaron las chavas después de tanto champan, decidieron subir a los cuartos, pero Mía, que tenía que haber acompañado a Lupita y haberse ido a su cuarto junto con Miguel, se quedó dormida en la cama de Lupita. Cuando Santos llegó se encontró a Mía dormida en la cama y a Lupita dormida con la cabeza inclinada sobre ella y una manta agarrada; parecía que había querido arropar a su amiga pero le venció el sueño. Sin querer hacer ruido, subió hasta el cuarto de Miguel y Mía y tocó a la puerta.

-¿Qué onda bro? .. Este..¿no es un poco tarde para que andes a estas horas rondando por el hotel..?

-Precisamente vine por eso...Mía y Lupita se quedaron dormidas en mi cuarto y no quise despertarlas...espero que no te importe si yo...este..me quedo contigo...

-Claro, no hay problema. ¿Entonces Mía está con Lupe en el cuarto? (preguntó cuando ya estaban entrando) Me tenía preocupado...

-¡Aishh! Mi cabeza....(dijo Lupita al incorporarse) ¡Santo Dios! ¿Qué hora es..? ¡Mia!...¡MIAAAAAA!!

-¡¡AAAyyy! ¡NO POR FAVOR, POR FAVOR SE LO SUPLICO, USTED NO PUEDE DEJAR DE DISEÑAR SEÑOR ARMANI! NO, NO, NO Y NO!! (gritaba Mía aún en sueños)

-¡MIAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! (repitió Lupita derramando un poquito de agua sobre la cara de su amiga)

-¡Aaaiishh! ¿¡Lupita!? ¡Me asustaste caray! ¿Esta es forma de despertar a alguien?

-Mía, ¡mira qué hora es! Si no nos damos prisa, no podremos prepararnos para estar puntuales en Águila Imperial, te recuerdo que Diego quiso que fuéramos allí hoy al mediodía, aunque no quiso decir por qué...

-¿Y por qué no le preguntamos a Roberta y ya, solucionado? Ahora que están casados ella sabrá qué quiere hacer su maridito...y yo necesito dormir...(añadió girándose en la cama y volviendo a taparse con las sábanas)
-Es que.. Mía si te soy sincera creo que Roberta no sabe nada..Aunque ya me había tomado 3 copas de champan, me pude dar cuenta que Diego evitaba siempre hablar del tema si Roberta estaba cerca...

-¿No manches? ¡¿Qué crees que será? (preguntó la rubia, sin disimular ya un poco de interés e incorporándose para estar sentada junto a su amiga)

-Yo creía que tú sí que podrías saber algo...al fin y al cabo tú eras la presidenta del comité, quizá te haya comentado algo...

-Pérame a ver si recuerdo algo...¡auch! Aunque con este dolor de cabeza poco voy a poder hacer...¡NO! ¿¡No será...¡?(Mía salió corriendo hacia el baño y prendió la ducha, dejando a Lupita con la duda y algo desconcertada)

-¿¡Mía te importaría explicarme!? Porque la neta no entiendo nada...

-Lupe marca a la recepción del hotel, si no me equivoco, tendrán algo para nos...(no pudo terminar la frase cuando el teléfono comenzó a sonar) ¿Puedes atender tú?

-¿Bueno? (contestó Lupita) Ajam...Sí...No, ese tiene que ir a la habitación...767, exacto y el que está a nombre de Mía Collucci tiene que llegar a este cuarto...Sí el 682. Ok, Gracias.

-¿Y qué te dijeron? (gritó Mía desde la ducha) ¡Algo de unos envíos especiales o algo...hay uno a nombre de cada uno!

-Ayy Dieguito...Nunca cambias...Este...¡Lupe! Ven, dúchate, que yo ya terminé, me voy a ir maquillando, luego tú me ayudas con el peinado y yo te ayudo a ti y vamos más rápido...Así para cuando llegue el paquete ya sólo nos quedará vestirnos...

En la suite nupcial...

-Roberta mi amor, termina ya de ducharte ydate prisa, hoy te tengo unas cuantas sorpresas...(alguien llamó a la puerta de la suite y Diego fue a abrir,un encargado del hotel le entregó los paquetes correspondientes a los novios yse fue a seguir repartiendo) Y la primera ya llegó.

Roberta salió del baño aún mojada y cubiertaúnicamente con un albornoz blanco con la letra R bordada en una solapa, tambiénregalo de Diego, pero este fue por su compromiso.

-¿Qué es? (preguntóella)

-¿Por qué no vienes y lo abres? (contestó Diego, que se había aproximadoa la cama y había depositado el regalo, estaba cubierto con una gran bolsa deplástico blanca, era alargado y no tenía apariencia de pesar demasiado, tampocoera muy grueso) Espero que te guste...

-Diego es...precioso (dijo ella al abrirlo, contenía unprecioso vestido en rojo, sexy y atrevido, pero también formal.)Pero...no entiendo mi amor, ¿por qué un vestido?

-Emmm, verás Roberta..esto nos lleva a lasiguiente sorpresa...Hoy, en la noche nos vamos de luna de miel, pero el día lopasaremos en Águila Imperial, y quiero que te pongas ese vestido.

-¿En Águila Imperial? (dijo ella algo confusa)Diego esto no será otra de tus estrategias para luego irte a investigar algosobre tu papá,¿verdad? Esta vez no me dejarás sola, no, esta vez no Diego...(sus ojos de empezaban a empañar por aslágrimas) No ahora que estamos casados...No, me niego, si tú te vasyo me voy contigo y si no quieres, tú tampoco vas.

-Roberta escúchame...(Diego se acercó a ella y la intentóagarrar de los brazos para tranquilizarla)

-No, no me vengas a consolar (dijo ella soltándose de sus brazos)

ntro.<Mf