Entre Heroes y Hadas

Parte 134

Mientras tanto, en la Sede Central de la AFI en Ciudad de México otra escena dramatica estaba a punto de ocurrir...

Un hombre de unos 55 años, medio calvo y un poquito gordo; con apariencia de profesor de ciencias estaba trabajando en una moderna sala de computadoras y elementos electrónicos...De pronto Cisneros y Santiago entraron...

-¡Señor Director! El informe sobre los nuevos aparatos de escucha electrónica ya casi está...

-Ramiro...no he venido por eso...Quiero que me entregues tú placa, estás arrestado...

-¿¡Arrestado!? ¿¡Por qué!?

-¡Por traición! (exclamó Santiago interviniendo)

-Ya sabemos que le entregaste la información a El Chacal para encontrar a Diego Bustamante...fuíste muy descuidado, teniendo en cuenta que tú manejabas las transferencias de tecnología con los norteamericanos en el marco de los convenios de cooperación...cuál sería su sorpresa cuando la policía de Los Ángeles encontró, en uno de los vehículos que dejaron los pandilleros en el asalto a el hotel, nada menos que uno de los radares que nos dieron para seguir los detectores que colocamos en el coche de Diego...rastreamos la pista hasta tí...

El hombre se dejó caer en una silla...

-¡Sabía que me descubririan!

-¿¡Por qué Ramiro!?...¿¡Por dinero!?...¿¡Cuánto vale la vida de unos jóvenes como Diego y sus amigos!? ¿¡Estabas ayudando a matarlos por lana!?...¿¡Cuánto costaba la sangre de esos chavos para tí!? ¡CONTESTA! (dijo Cisneros indignado, pero sin perder su porte señorial)

-¡No fue por dinero!

-¡Cochino mentiroso! (exclamó Santiago asqueado)

-Hace unos años... (comenzó a contar el hombre)... mí hija María Isabel...cayó en el mundo de las drogas...Comenzó a los 15 años, pero ni su madre ni yo supimos verlo...No nos dimos cuenta hasta que era muy tarde...Comenzó con drogas suaves, después paso a las más fuertes...Al cabo del tiempo estaba robando en la casa para mantener su vicio...cuando tratamos de internarla, se escapó de la casa...vivió en la calle con otros drogadictos y...hacía de todo para seguir con el vicio, cosas horribles...Y en una ocasión... (al hombre le costaba seguir)... un grupo de narcos se aprovecharon de su debilidad...a cambio de darle las drogas que ella desesperada necesitaba dentro de sus crisis de adicta...a cambio de darle la droga...la obligaron...¡hicieron que tuviera sexo con varios de ellos al mismo tiempo para "pagar" por la droga!

Cisneros y Santiago oían en silencio, mientras el hombre lloraba...

-¡Los narcos lo grabaron todo en video! ¡Las escenas de esa horrible orgía!...Tiempo después, mí hija volvió con nosotros y se rehabilitó...Logró romper la dependencia y curarse...conoció a un buen chico y se casó...ahora tienen un niño de un año...pero los narcos guardaban el video, porque sabían que yo era su padre y trabajaba aquí...Hace poco El Chacal me mandó una copia del video, y dijo que sí no hacía lo que él quería; se lo enviarían a el esposo de mí hija...Él no sabe nada de su pasado, y sí veía el video... podría divorciarse y quitarle al niño...y entonces ella podría recaer en las drogas y morir...Y mí esposa, no lo soportaría...igual que yo...

Cisneros se quedó callado un minuto...

-¡Pudiste confíar en mí! (dijo Cisneros)

-¡Tenía miedo! ¡Me sentía culpable por ese muchacho...pero...! ¡Yo no quería que muriera, pero pensé que no tenía alternativa! ¡Ahora sé que no tengo perdón!...¡Casi matan a un inocente por mí culpa!...¡Y ahora mí familia va a enterarse de todo, de la basura que soy!

Cisneros y Santiago sentían pena por el infeliz hombre...

-¡Ven Ramiro! (dijo Cisneros)

-¡Ya voy señor!

Pero el hombre, en un rápido movimiento sacó una pistola del escritorio...

-¡VA A MATARLO DIRECTOR AL SUELO! (gritó Santiago sacando su pistola, pero Cisneros lo detuvo al darse cuenta de la realidad)

-¡NO ES ESA SU INTENCIÓN! (exclamó Cisneros)

El hombre se puso la pistola en la sien...

-¡No puedo dejar que mí familia pase por la vergüenza de un juicio! ¡Y TODOS SE ENTERARÍAN DE LO DE MÍ HIJA!...¡NO PUEDO DEJAR QUE MÍ YERNO LO SEPA!...

-¡No lo hagas Ramiro...hablemos! ¡Buscaremos la solución!

-¡No Director Cisneros, no hay salida! ¡Usted es un gran hombre...por favor, sea generoso con mí familia aunque yo no lo merezca! ¡Que mí mujer no sepa que morí con deshonra, que piense que morí con honor!...¡Que mí hija pueda vivir el resto de su vida féliz...yo quiero pagar el precio por su felicidad!

-¡NO LO HAGAS RAMIRO!

-¡DIOS, PERDONAME!

El sonido horrible del disparo estremeció la oficina, mientras Cisneros y Santiago veían una imagen que recordarían el resto de sus vidas...la cabeza del hombre que volaba en pedazos por el impacto de la bala, arrojando sangre y sesos por todas partes...

Impresionados se quedaron los dos hombres, mientras la puerta se abría de golpe y entraban varios agentes con las pistolas en las manos para proteger a su Director, alarmados por el disparo...encontrandose la escena dantesca...

-¡EMERGENCIA...EMERGENCIA...AGENTE HERIDO EN LA CUARTA PLANTA! ¡NECESITO UN EQUIPO MÉDICO DE RECUPERACIÓN DE INMEDIATO! ¡HAGAN VENIR UNA AMBULANCIA! ¡HERIDO CRÍTICO! ¡RÁPIDO! (gritaba Santiago por la radio)

Cisneros veía el cuerpo impresionado, y luego su rostro se llenó de odio...

-¡Otro muerto más que cobrarte...Chacal! (exclamó sin poder reprimir la rabia, mientras apretaba el puño)

Al día siguiente Roberta recibió una llamada en el hotel...Era el primo de Giovanni...

-¿¡Dentro de una hora!?...¡Allí estaremos! (exclamó Roberta emocionada)

¡Al fin parecía que los caminos de Roberta y Diego se cruzarían de nuevo!, y la chica estaba ansiosa porque eso ocurriera...pero las fuerzas de la oscuridad acechaban desde las sombras...

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