Entre Heroes y Hadas

Parte 19

Yo sé que tienen razón chavas...(replicó Roberta más calmada) Pero es que ustedes no están en mí lugar...cada día el sexo se va acumulando entre nosotros dos como el vapor en una olla de presión...Y neta no sé como esto puede afectar la relación...sobre todo para Diego...

-Bueno Roberta, en el caso de él no creo que sea lo mismo ni que haya tanta urgencia, porque después de todo Diego ya no es virgen...¡Ay! (decía Luján cuando fue interrumpida por un pellizco de Lupita).

-¡Gracias por recordarme que Diego fue desvirgado por la Paula esa! (dijo Roberta molesta) ¡Otra razón más para preocuparme, que Diego tiene experiencia y yo no!...¡Que me compare con las otras que ha tenido antes, sobre todo con la profesional del sexo de "Paulita"!

-¡Pero Roberta, casi todos los chavos tienen experiencia antes de llegar a nosotras...no ves que todos son unos sinvergüenzas...yo no espero que ni Téo sea virgen! (replicó Luján).

-Roberta, tú lo que necesitas es hablar con alguien que te pueda aconsejar...¿Por qué no hablas con tú mamá?(dijo inocentemente Lupita).

-¿¡ESTAS LOCA!? (exclamó Roberta).

-¡Pero tú mamá es buena onda!...¡Acuerdate que hace tiempo nos dio una buena charla de sexo en el colegio!

-¡No me acuerdo porque no me pego la gana de oírla!...¡Mí mamá sería la última persona a la que yo le pediría consejo en este asunto!...¡Además, ya sé lo que me va a decir...Que me guarde virgen para el matrimonio o hasta que tenga 30 años...y luego buscaría a Diego para intimidarlo para que no me desvirgue!

-¡Y sí le dices a Pepa!...(dijo Luján).

-¡Luján por favor, Pepa esta loca como una cabra y tampoco es imparcial! ¡Es casi peor que mí mamá!

-Y sí...(iba a decir Lupita9.

-¡Chavas, neta se los agradezco...pero así no llegamos a ningún lado!...Ustedes son tan virgenes como yo...y ya que no puedo hablar con un adulto sólo puedo hablar con alguien de mí edad que posiblemente haya tenido su primera vez por un amor tan grande como el que yo siento por Diego...y en este colegio sólo hay alguien que quizás pueda estar en ese caso...aunque a lo mejor sería preferible hablar con la pared que con ella...

-No te entiendo, ¿de quien hablas? (preguntó Lupita).

-De... Mía Colucci.

-¿¡QUE!? (exclamó Luján).

-¿¡Vas a hablar con Mía de tú problema!? (dijo Lupita sorprendida).

-¿¡No te gusta la idea!?...¿¡No es amiga tuya también!? (replicó Roberta).

-Claro, pero ustedes dos...Además, ¿Por qué piensas que ella ya lo hizo con Miguel?

-Bueno, no sé sí lo haya hecho, pero es posible...y como ellos dos se quieren tanto como Diego y yo...y como han tenido problemas parecidos a los nuestro...No crean que me emociona hablar con la "cabeza hueca" de Mía, pero "agarrando aunque sea fallo"...y mejor salgo del mal trago rápido. Voy a hablar con la descerebrada ya.

Roberta salio disparada del dormitorio.

-¡Ahora sí que se le zafó un tornillo! (dijo Luján al verla marchar).

-¡Tienes razón! (dijo Lupita atónita).

Mía estaba sentada en su cama viendose al espejo, dedicada a su labor favorita: cuidar de su belleza. Estaba tan absorta que no escucho cuando Roberta abrio la puerta y entro al dormitorio.